Fueron las palabras de uno de sus hijos al avisar a un vecino que brindó testimonio en el juicio que se lleva adelante por el femicidio de Gabriela Zurita. El miércoles 10 se dictará la sentencia.
El miércoles 10 de febrero finalizará en la Sala IV del Tribunal de Juicio la audiencia de debate seguida contra Gustavo Adolfo Herrera Leañez, imputado por homicidio doblemente calificado por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género, en perjuicio de Gabriela Romina Zurita.
Ese día, a partir de la 8, se escucharán los alegatos y, posteriormente, se dictará la sentencia. El juicio unipersonal está a cargo de la jueza Norma Beatriz Vera.
Habiendo finalizado las declaraciones de los testigos ofrecidos por las partes, la magistrada dispuso hoy pasar a un cuarto intermedio hasta el próximo miércoles.
Herrera Leañez está acusado de haberle quitado la vida a su pareja Gabriela Zurita, a quién habría agredido y ultimado luego, arrojándole un bloque de cemento en la cabeza.
El 1º de julio de 2015 a horas 5:00 am aproximadamente, Gabriela fue asesinada. El hecho, según se lee en un parte de prensa del Colegio de Abogados, fue alertado a los oficiales de la subcomisaria de Vª Lavalle por “Pedro, padre del encausado. Consta en el proceso, una entrevista realizada por la policía a un vecino de la zona, David, quien expresó que esa madrugada se encontraba afuera de su casa cuando observó en la intersección de calle Intendente San Miguel y Pje Carlos Davalos al menor conocido como ‘Peke’, hijo de Gabriela, quien cargaba a una beba y a la par trasladaba a una nena (sus dos hermanas) quien en llantos dijo: ’…están matando a mi mama…’, entonces David decidió ir a la casa de la familia, donde le informó a Pedro que los chicos estaban en la calle y llorando agritos. Fue entonces cuando Pedro concurrió a la comisaria”.
Según se supo después del hecho, el acusado Gustavo Herrera estuvo prófugo y recién fue detenido dos días después en la casa de su hermana en villa Mitre.