El turismo no encuentra rumbo y el oficialismo celebra eventos de “negocios” de un sector sin dinámica. No son pocos los funcionarios “U” que recuerdan con nostalgia “al gordo” romerista Racedo Aragon que, gran vendedor de humo, encabezó un crecimiento turístico que no volvió a darse en Salta.
A toda furia los funcionarios de Juan Urtubey celebran que un evento de negocios turísticos, realizado en Salta generó un total de 10 mil reuniones comerciales. Mucha emoción, mucha alegría, pero pocas nueces.
Oficialmente se destacó que de la totalidad de los operadores presentes, alrededor de 400 salieron a recorrer la ciudad y pudieron conocer personalmente sus paisajes y atractivos, todo su potencial hotelero, sus restaurantes y espacios culturales.
El director del Programa de Desarrollo de Turismo Sustentable, Fernando Escudero, fue el anfitrión de turno. Sin embargo, el sector no se muestra dinamizado en la provincia. Y eso se comienza a sentir.
En la intimidad no son pocos los que extrañan al casi intendente de Yerba Buena (Tucumán), Bernardo Racedo Aragón, recordado ex Secretario de Turismo de la gestión romerista. Lejos de Salta el ex funcionario estaría abocado a convertirse en intendente.
Afirman los propios tucumanos que su gestión en Turismo en la vecina provincia no tuvo tantos logros como en Salta. Reconocen que eso se debe no tanto a Racedo Aragón, sino al crecimiento desmedido que mostró Termas de Rio Hondo (Stgo. Estero).
En voz mucha gente del turismo reconoce que fue el último funcionario que hizo avanzar al sector. La deducción es alarmante: el turismo lleva siete (7) años con freno de mano.
Pese al optimismo U, no son pocos los que reconocen que “el gordo” (ahora mucho mas delgado) ex funcionario, era un gran vendedor de humo, pero cual encabezó un crecimiento, que nunca volvió a verse en el turismo de Salta.
Ni los 80 vuelos semanales de la Capital, ni los Rally Dakar, que tanto emocionan a los salteños pueden disimular la apatía. A nadie escapa que durante los años de gobierno U no se hicieron sentir las inversiones hoteleras.
La Capital cuenta con unas 13 mil camas, que son poco más que el número que en 2007 dejó el romerismo. Llegó “El Cambio”, pero cambió poco y nada.
Tampoco es ajeno a los ojos de los especialistas que pese a tantos viajes internacionales realizados por los funcionarios salteños, el crecimiento en arribo de turistas extranjeros tampoco es el más alentador.
El propio ministerio de turismo, a cargo de mariano ovejero reconoce que “en lo que va del 2014, el mercado boliviano aportó 19% del total de turistas extranjeros, especialmente durante la temporada de verano”.
Es evidente que los franceses, alemanes y japoneses son los poseedores de billetes euros, tan atractivos para el mercado de servicios turísticos salteños. La falta de gestión está a la vista para todos.
El Milagro Salteño alcanzó un 85% de ocupación hotelera, pero hace mucho tiempo que no habilitan casas de familia ante tanto turista.
Se repiten las voces que señalan a María Livia y a la Virgen del Cerro, como el verdadero Ministro de Turismo.
Un logro importante en materia turística de la actual gestión, es haber concretado un registro de guías de turismo. Casi ocho años demandó, pero está.
Del tren a las nubes poco y nada se puede agregar….
