Argentina votó a favor de una resolución de la ONU en contra del embargo de Estados Unidos a Cuba. La reemplazará Gerardo Werthein, embajador en Estados Unidos.

El presidente Javier Milei decidió echar a su canciller Diana Mondino, luego de que el país votara en contra de Estados Unidos e Israel en la asamblea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en la que se debatió levantar el embargo de la primera potencia contra de Cuba. La reemplazará Gerardo Werthein, embajador en Estados Unidos, según informó el vocero presidencial Manuel Adorni.

Para el presidente “Gerardo Werthein es un crack”, suele comentar a su entorno más íntimo, al tiempo que destaca la calidad de las reuniones que le ha organizado tanto en sus viajes a los Estados Unidos como en otras partes del mundo.

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, durante su disertación en el Argentina Fintech Forum.

El primer mandatario se encuentra analizando quién será el nuevo embajador en los Estados Unidos. Como siempre ocurre comenzaron a rodar nombres entre ellos Héctor Marcelo Cima actual secretario de relaciones económicas y Diego Sucalesca quien detenta la presidencia ejecutiva de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, ambos funcionarios tienen un muy buen vinculo con Karina Milei.

En medios oficiales se comenta que el jefe de Estado no dudó en resolver el despido de Mondino tras enterarse de que el país había votado en contra de la posición de los dos los dos principales aliados internacionales del Gobierno de La Libertad Avanza.

El gobierno votó en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en contra del embargo económico de Estados Unidos a la república socialista de Cuba. La resolución fue aprobada con 187 votos a favor, 2 en contra (Estados Unidos e Israel,) y una abstención (Moldavia).

Cabe señalar que sorprendió a muchos este voto ya que es conocida la posición del gobierno de estar alineado a los Estados Unidos e Israel.

La cuenta de la Oficina del presidente publicó posteriormente de conocido el reemplazo un comunicado en sus redes sociales haciendo referencia a qué aspira en materia de relaciones exteriores.

Para el gobierno «el país atraviesa un período de cambios profundos y esta nueva etapa exige que nuestro cuerpo diplomático refleje en cada decisión los valores de libertad, soberanía y derechos individuales que caracterizan a las democracias occidentales».

Asimismo, anticipa que se llevará a cabo “una auditoría del personal de carrera de la Cancillería, con el objetivo de identificar a impulsores de las agendas enemigas de la libertad».

Unas semanas atrás, en esta misma línea, la presidencia envió una carta a la Cancillería para el personal diplomático donde, entre otros argumentos, planteaba que los organismos internacionales “se han sometido” a una agenda “que obedece a intereses privilegiados”. El mensaje presidencial considera que estas instituciones “han promovido políticas colectivistas que atentan contra el crecimiento económico, violentan los derechos de propiedad, y entorpecen el proceso económico natural”

El texto hace hincapié en que “esta nueva doctrina implica, por definición, que ningún funcionario de esta administración ni quienes representan a la Argentina en el exterior deben acompañar ningún proyecto, declaración, resolución, o documento que establezca violaciones al derecho a la vida, la libertad y la propiedad; o un trato desigual frente a la ley; valores que son pilares de esta nueva administración, de ningún ciudadano del mundo”.

Concluía el presidente afirmando que: “El protagonismo asumido por nuestro país en el escenario global como defensor de los valores republicanos de las democracias occidentales requiere de un cuerpo diplomático comprometido con las ideas de la libertad y dispuesto a trabajar mancomunadamente para proteger los intereses nacionales”.