Los tiempos electorales nacionales se aceleran y los resultados de 2025 podrían dividirse entre los extremos de la grieta y una tercera posición saencista. En Salta, el oficialismo padece las peleas intestinas luego de acumular transversalmente el poder. En esta semana comenzaron ha insinuarse con más nitidez los prospectos de candidatos para los cargos más importantes en disputa. Las bancas de los senados nacional y provincial acaparan la vidriera.
N. de R.
Tres grandes grupos son los que buscan incidir en los comicios de 2025. El saencismo con su tinglado heterogénero, el kirchnerismo que busca copar el Partido Justicialista y La Libertad Avanza (LLA) que tiene una franquicia con la mitad de los electores todavía en su bolsa. Todos dependen de los buenos acuerdos que, en casi todos los casos, exige sometimiento.
Los escarceos entre el romerato y el urtubeycismo han comenzado. Los cruces a través de reels, que les adjudican defectos de gestión en el pasado, pasan desde la rescisión del contrato de peaje de Aunor hasta las irregularidades en Salta Forestal. La escalada pronto podría comprender otros episodios que en el pasado generaron altos costos políticos como la estafa inmobiliaria de La Ciénega, negocios incompatibles con un hangar, las irregularidades en viviendas del Barrio Altos de Medeiros y hasta el Fondo de Reparación Histórica. Todos esconden, con puerta entreabierta, varios cadáveres que tienden a resucitar cada vez que las vertientes salteñas de la “Casta” confrontan.
El senador Juan Romero ya tiene la bendición de Mauricio Macri y de Guillermo Francos gracias a sus habilidades parlamentarias. Alfredo Olmedo pregona tener derechos fundacionales en LLA para quedarse con el primer lugar en la lista de senadores nacionales.
En el otro rincón de este ring aparecen Pablo Ismael Outes, Juan Urtubey y Sergio Leavy para la Cámara Alta, mientras que la ahora silenciosa Pamela Caletti, Emiliano Estrada, Mónica Juárez y Omar Exeni son los que piensan y sueñan con llegar a ser diputados nacionales por Salta.
Los audaces de siempre
Sin mayor aval que la voracidad sectorial, y conscientes del peligro de extinción que invade al Partido Justicialista, presentaron con bastante pudor una lista tentativa para diputados nacionales en la que intervino la mano del siempre cuestionado Antonio Hucena.
Omar Exeni quiere aprovechar los vínculos tejidos por su particular condición que lo hace coincidir con el actual senador nacional por Buenos Aires Wado de Pedro y próximo presidente del PJ Nacional en reemplazo del vituperado Alberto Fernández. A él se sumó la imposición del hermano para cubrir el cupo femenino con Patricia Hucena y el aporte del fronterizo intendente de Tartagal Franco Hernández Berni que quiere consolidar el aterrizaje en el saencismo. Más que por compatibilidades ideológicas al norteño lo gobiernan las necesidades de que su municipio siga contando con recursos y obras. Todos ellos prometen que aportaran votos a Pablo Outes, que recorre paciente e incesantemente todo el territorio y participa de festivales y procesiones a la espera de un ok de Finca Las Costas para disputar un escaño en el senado nacional.
Como era de esperar, esta lista no parece más que un fusible en medio de un largo proceso de selección de candidatos en los que finalmente se impondrá el criterio de Gustavo Sáenz. Lo que sí, muestra la pobreza dirigencial que poco podría aportarle al primer mandatario a la hora de reivindicar una mayoría electoral. En la intimidad de Grand Bourg todos saben que hay otras personas sobre las que se inclinarán las bendiciones, como Pamela Caletti, Mónica Juárez que ya visitó Orán en estos días, o Flavia Royón, convertida en una cirujana en las operaciones con los conglomerados empresariales mineros y energéticos.
Apoyo popular sin dirigentes
También padecen carencias los bolsillos dirigenciales de la LLA que, aunque renieguen, no tienen más que esperar que Javier Milei -o su hermana Karina con Nicolás Caputo- decidan si la cabeza de lista para senador nacional será Juan Romero o Alfredo Olmedo. Salvo un milagro, Emilia Orozco quedaría relegada a la competencia provincial, y Bettina Romero podría obtener un premio consuelo como segunda en la lista de perder la pole position su padre, o un cargo de relevancia dentro de los tantos que todavía están vacantes en el Estado Nacional.
En el interior provincial son escasos los dirigentes que pueden garantizar que el apoyo popular llegue a las urnas. La erradicación de las PASO -una decisión firme de Milei- y la falta de figuras con conocimiento público hacen perder aire a un sector que cuenta con un Presidente con el 50% de adhesión. Claro que las listas de legisladores nacionales no tendrán semejante apoyo porque el “León” no aparecerá en las boletas.
Las bancas de diputados nacionales todavía no tienen dueño. Virginia Cornejo presiona a Patricia Bullrich, como Miguel Nanni lo hace con las autoridades nacionales de la UCR. José Gauffin y Sofía Sierra son moderados no solamente como legisladores sino como candidatos. Solamente la sequía dirigencial los pondría en las listas. El problema es que, además de pocos, las encuestas son lapidarias con ellos y no han logrado siquiera conocimiento público expandido.
El kirchnerismo local
Los que juegan al triunfo personal en medio de la derrota electoral son Leavy y Estrada, que ya acordaron una fórmula para repetir mandatos. Wado de Pedro tiene dos pedidos concretos en la mesa del PJ Nacional. Por un lado el de los kircneristas para intervenir el PJ salteño e incorporarlo al frente transversal que tiene como líder a Cristina Fernández de Kirchner. Por el otro, el de Outes y Exeni para fracturarlo. Por más relaciones amistosas que se hayan cultivado está claro que De Pedro no traicionará a la “Jefa”. De imponerse el kirchnerismo en el copamiento del PJ las autoridades locales, con Esteban Amat a la cabeza, deberán entregar el partido y declinarán sus expectativas.
El presidente de la Cámara de Diputados y socio político de Alberto Fernández -Antonio Marocco- y figuras menores aún como Gastón Galindez y Soledad Troyano, quieren resistir apoyando el gobernador riojano Quintela que competirá por la presidencia del PJ Nacional. De ganar les garantiza que podrán usar el escudo y dividir al kirchnerismo. Es aquí donde podrían coincidir los proyectos con Outes, Exeni, Hucena y compañía. Como se ve, para algunos el juego es de “todo o nada”.
Premios consuelo
Para algunos de estos actores, los comicios provinciales también aparecen como un “Plan B”. Es el caso de Mónica Juárez que dice contar con la aquiescencia de Gustavo Sáenz, pero que advierte que en Canal 11 es donde aparecieron sus competidores internos. “Vitín” Lamberto y Guillermo Kripper podrían ser candidatos a senador provincial y disputarle la apetencia.
Son varios los diputados que quieren repetir a pesar del pobre desempeño en la Legislatura Provincial. Puede asegurarse que casi todos capitalinos que le exigen al gobernador un nuevo mandato no pasan de un punto en las encuestas y, a duras penas, pueden acreditad lealtad no exenta de caprichos.
Emilia Orozco -como dijimos- es presionada para traccionar listas de LLA y sería la postulante a senadora provincial por el departamento capitalino. Sus adhesiones masivas en las redes sociales despiertan temor en el oficialismo municipal y provincial. A pesar de sus desatinados apoyos a los represores setentistas y los excesos a la hora de aprovechar las chequeras de vuelos aéreos que pagamos todos los argentinos, la joven abogada sigue despertando expectativas.
Saencismo redireccionado
Las estructuras del saencismo comienzan a aceitarse aunque, de vez en cuando, se confunden con mensajes cruzados y algunos destierros internos. Es que el Gobernador ha decidido concentrar la mayor parte de sus dirigentes en su partido provincial PAIS, que ahora preside el ex Ministro de Educación Matías Cánepa, secundado por intendentes y altos funcionarios. Su aparición ha implicado el relegamiento de Ricardo Villada que ya no comandará lo que fue el frente “Unidos por Salta”. Hace rato que las relaciones del Ministro de Gobierno atraviesan por una disimulada crisis con el líder mayor del saencismo.
La devaluación también castiga a lo que fue “Gana Salta” que giraba sobre el PJ acompañado por otros satélites partidarios y que tenía como comandante a Pablo Outes. Hoy Sáenz, por razones estratégicas, se muestra más alejado que nunca de un PJ siempre vinculado con la casta con el kirchnerismo. Los que creen que todavía tienen vigencia no tienen conciencia de que junto a ellos habitan cadáveres políticos.
Quien sigue silencioso concentrado en obras y masividad de reuniones es Emiliano Durand. Sabe que es el segundo elector más importante de la provincia luego de Sáenz. Aunque muchos de los cercanos al Gobernador mantienen una inquina personal hacia su figura, en el fondo todos saben que necesitan del apoyo desequilibrante de este intendente que seguramente negociará las listas de concejales propios y algún pedazo de la torta de poder provincial.