El Procurador General de Salta, Pedro García Castiella, destacó la necesidad de una agenda de política criminal unificada a nivel nacional para hacer frente al crimen organizado en Rosario y en toda Argentina. Según Castiella, esta agenda debería involucrar a todas las provincias y ser coordinada entre la Nación y las jurisdicciones provinciales.
El procurador Castiella señaló que el crimen organizado no es un fenómeno aislado en Rosario, sino que está presente en todo el país. Hizo referencia a las declaraciones del Ministro de la Corte de la Nación, Ricardo Lorenzetti, quien el año pasado afirmó que las bandas criminales están instaladas en todo el país y que se debe enfrentar este problema a través de una política criminal clara y federal. Castiella también resaltó la importancia de evitar tratar este tema como compartimentos estancos o fenómenos aislados, abogando por una coordinación efectiva entre la Nación y las provincias.
García Castiella resaltó la gravedad de la situación en Rosario, equiparándola al terrorismo y señalando que el Estado ha enfrentado amenazas por parte de detenidos para instaurar el terror en la sociedad. Enfatizó la importancia de que el Estado mantenga su capacidad disuasiva frente al crimen y no retroceda en ninguna circunstancia.
Además, destacó la necesidad de implementar políticas preventivas para evitar situaciones no deseadas. Propuso fortalecer los equipos de investigación con personal especializado, mejorar el control en las cárceles y sobre lo que ocurre dentro del Servicio Penitenciario. También subrayó la importancia de tener un control efectivo de las fronteras, una responsabilidad del gobierno nacional, para evitar que las autoridades provinciales se vean sobrecargadas con el combate al crimen organizado.
Asimismo, expresó su preocupación por la delincuencia asociada al crimen organizado, como los sicariatos, secuestros y balaceras, que han afectado a la provincia durante mucho tiempo. Destacó la urgencia de combatir el narcotráfico de manera constante e incansable, promoviendo una política criminal y legislativa seria y sostenida en el tiempo. Subrayó la importancia de una estrategia integral y comprometida en lugar de respuestas esporádicas y espasmódicas.
García Castiella advirtió sobre la importancia de ser prudente en la comunicación, señalando que la reacción del narcotráfico o del crimen organizado en Rosario puede haber estado relacionada con la difusión de lo que ocurría en las cárceles y el control que se quería ejercer. Hizo hincapié en que con el crimen organizado y la política criminal no se debe hacer política, ya que son dos temas completamente diferentes.
En cuanto a la inquietud generada por el crimen organizado en el departamento Orán, enfatizó que la situación está bajo control, con muchas personas encausadas y bajo prisión. Señaló una disminución significativa en la tasa de homicidios en la localidad de este año al año pasado, indicando que se está avanzando por un buen camino. Sin embargo, destacó que no se debe descuidar la situación, ya que el problema del crimen organizado es nacional y requiere una política criminal federal, nacional y seria para vislumbrar soluciones a largo plazo.
