Un desarrollo del Inta Salta logró el 97 por ciento de eficacia contra el Aedes.

El Convenio de Cooperación Técnica entre el INTA Salta, el Ministerio de Salud provincial y la Universidad Nacional de Salta (UNSa), tiene como objetivo “la producción asociada y distribución intraprovincial de biocontroladores, para ser utilizados exclusivamente en el control de insectos vectores de esas enfermedades”, señala Guadalupe Mercado Cárdenas, investigadora del INTA Salta.

El trabajo del equipo de Cárdenas consistió, entonces, en la confección de una formulación líquida, es decir, organismos vivos (hongos, virus y, en este caso en particular, la bacteria biocontroladora) capaces de repeler, matar o inhibir el desarrollo de insectos, ácaros, gasterópodos, nematodos y patógenos.

Tomando la experiencia de Santa Fe, el larvicida se comenzó a aplicar en los pozos ciegos infectados de la localidad fronteriza de Salvador Mazza y luego continuó por Aguaray, Embarcación, General Ballivián, General Mosconi, Tartagal y Coronel Cornejo. Zonas con tasas tan altas de infección como en los sitios críticos de Paraguay y Brasil. En cada uno de los puntos se redujo la población de mosquitos en un 97 por ciento.