Desde el diario familiar aseguraron que “no protege al ambiente y genera pobreza”. En un notable lobby pidieron desmontar 50 mil kilómetros cuadrados.
Los desmontadores, en Salta, tienen diario propio. No está mal leer, a veces, las editoriales del diario El Tribuno. Muestran qué piensa Juan Carlos Romero sobre un tema, y qué haría Bettina de llegar, algún día, a ser gobernadora de esta comarca.
El fin de semana ese medio publicó una nota contra la Ley de Bosques, con argumentos como mínimo absurdos.
Según los Romero, el problema de la pobreza y de todos los males del país la tiene la ley de Bosques porque, según ellos, genera “estancamiento del desarrollo agroganadero de Salta”.
Les molesta, además, que el Presidente en la Asamblea Legislativa y luego en la Cumbre Climática realizada en el Día de la Tierra anunció posibles reformas sobre la Ley de Bosques.
“El tema es vidrioso para nuestra región, ya que la administración nacional acumula desde 2008 una deuda superior a los cuatro mil millones de dólares. La ley vigente desde entonces preveía un cuantioso fondo de fomento destinado a compensar a los propietarios que no pudieran explotar sus tierras en virtud de esa ley. Nunca se cumplió”, dice.
Y ahora viene la queja: “por la Ley de Bosques, Salta tiene 50 mil kilómetros cuadrados de superficie inmovilizada”. Cuando el artículo usa la palabra “inmovilizada” quiere decir: “árboles que podríamos talar para meter soja”.
Esto es lo más absurdo del artículo: “La economía agraria en escala, llevada a cabo por empresas, es más controlable que la extracción y el pastoreo de subsistencia”.
¿Ahora la culpa de todo la tienen los pequeños agricultores? ¿Los pastores?