Los 60 kilos de cocaína que fueron sustituidos por yeso colocaron en el centro de las miradas a Gendarmería Nacional, que tenía bajo custodia la droga. Las declaraciones del juez Gustavo Montoya, si bien no precisan dónde fue violada la cadena de custodia, aumentan las sospechas sobre los gendarmes. (Helna Rigón)
El 10 de marzo pasado dos hombres fueron detenidos por el Escuadrón 20 de Gendarmería cuando intentaban cruzar la frontera por el río Bermejo cargando unos bultos que no eran precisamente ropa comprada en Bolivia. En la requisa encontraron varios paquetes de cocaína por un peso de 50,81 kilogramos. Recién el 14 de junio se dispuso el traslado de las sustancias al Escuadrón 20 de Gendarmería, en Orán. Según se pudo conocer, permaneció en ese lugar hasta las cinco de la madrugada del viernes 15 para luego ser trasladada a Salta para su quema en un horno del Parque Industrial. Allí se dieron cuenta que, por arte de magia, la cocaína se había convertido en yeso.
“Yo estuve presente en la quema. Había justo alumnos de la Facultad, que yo invité para que vean la quema; tomé un ladrillo al azar. Ahí advertí que ahí había una deficiencia respecto de la foto con lo que se estaba por quemar. Lo abrimos y advertimos que no era droga, sino parecido a yeso. Estando en ese ambiente, en el Parque Industrial, teníamos afectado el sentido del olfato, por lo cual los peritos no pudieron determinar fácilmente de qué sustancia se trataba; igual ya se podía ver que no era droga”, comentó a la prensa el juez Gustavo Montoya.
Y agregó: “Lo primero que dispuse fue guardar, encintar, precintar y decir: esta droga se vuelve a Orán. Eran 51 kilos y medio, que estaban distribuidos en 51 paquetes y pico. Se dispusieron inmediatamente las tareas investigativas, que consistieron en no crear demasiada espectacularidad, porque no se podía determinar dónde fue violada la cadena de custodia. En principio, se tomaron medidas contra el Jefe de Armas y el Jefe del Escuadrón, por lo cual se allanaron los domicilios de estas personas, sin obtener ningún resultado positivo a la investigación”.
Acusación frontal
“Quiero aclarar una cosa: ya sea la droga que se encuentre en el Juzgado o en el Escuadrón, la custodia de la droga está a cargo de Gendarmería Nacional. La llave de los depósitos a la vez los tienen los secretarios de juzgado”. Eso fue lo más contundente que dijo que el magistrado.
Además, Montoya informó que no hay detenidos y desmintió lo publicado en el diario de mayor tirada de la provincia: “No hay ninguna persona detenida. El diario El Tribuno dice que hay dos personas del juzgado detenidas, pero no es así. La verdad que yo admiro el grado de imaginación que tienen”, dijo en el marco de una conferencia de prensa que brindó ante la repercusión del hecho.
Al ser consultado sobre la intencionalidad de hacer circular falsas versiones, responsabilizó a “las personas que están metidas en esta investigación, o que quieren que no se investigue o que quieren crear un manto de sospechas. Esa noticia, la verdad ganaría un premio Nobel a la inexactitud, si se quiere como un modelo de ejemplo de cómo no se debe informar”.
También agradeció el “apoyo que me ha brindado el presidente de la Cámara Federal y también al Supervisor de la zona, que es el fiscal Carlos Amad, que él también salió a desmentir todo el contenido de ese medio”.
“Yo no tengo la certeza de que haya sido la Gendarmería, pero todos los caminos me conducen a pensar que ellos han sido la parte interesada”, sostuvo.
“Quiero aclarar una cosa: ya sea la droga que se encuentre en el Juzgado o en el Escuadrón, la custodia de la droga está a cargo de Gendarmería Nacional. La llave de los depósitos a la vez los tienen los secretarios de juzgado”.
Contó, además, que “tenemos gran cantidad de droga secuestrada, lo que demora un poco las pericias. Nosotros acá estamos en una zona muy caliente, por lo que no sabemos a ciencia cierta quién es el enemigo. El tema importante para mí es que el estupefaciente no quede en Orán. Y que sino, pase la menor cantidad de días ‘viva’ y se proceda a la inmediata quema”.
Versiones
Hay tres versiones. La primera abre un manto de sospecha sobre el Juzgado Federal de Orán.
Otra de las versiones es que la cocaína pudo haber sido cambiada por yeso en el traslado que no está muy en claro cómo se llevó la falopa del Juzgado al Escuadrón 20.
Y por último, la versión más conocida mediáticamente es que la droga pudo haber sido cambiada en el propio Escuadrón de Gendarmería Nacional, esta última teoría es la más resonante.
Un cuarto rumor, no digamos versión, también circuló. Según publicó un medio del norte, El Oranense, la banda de Juanzuti, “el patrón del mal del norte” que cayó semanas atrás y que tuvo impacto nacional, sigue operando en Orán.
Siempre según este medio, la mandanga que se convirtió en yeso era de este sector narco.