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Villa Lavalle: zona en peligro

 Aunque la noticia no tuvo mayor importancia para algunos medios locales, medios nacionales se hicieron eco de los hechos ocurridos en Villa Lavalle, cuando entre 10 hombres violaron a una mujer y apuñalaron a su pareja. Señalan que fue una venganza familiar. El gobierno solo los acompañó entregándoles ropa y alimento.

“Villa Lavalle, una zona a orillas del río Arenales, al sureste de la ciudad de Salta, es protagonista de denuncias, abusos, amenazas y violaciones entre dos familias. Una mujer de 32 años fue atacada por unos 30 hombres y 10 de ellos la violaron. La mujer estaba acompañada por su pareja que recibió puñaladas en distintas parte del cuerpo” señalan desde el sitio Infojus, allí también consignan que  fuentes de la fiscalía sostuvieron que el caso es complejo y que tiene que ver también con “peleas” entre dos familias del barrio. La noticia de la violación se conoció a partir del testimonio a una radio local de Alejandra Sallet, madre del novio de la joven abusada. “Son dos familias que están enfrentadas y se denuncian entre sí” explicó a este medio una fuente de la fiscalía.

Sallet contó que a la hora de denunciar el hecho, fue detenida en la comisaría de Villa Lavalle por un oficial a cargo. Explicó que mientras permanecía incomunicada, las mismas personas que abusaron de su nuera desvalijaron su casa.

“Existen dos denuncias distintas, una realizada el pasado 18 de enero y otra el lunes 26”, explicaron a Infojus Noticias fuentes policiales consultadas. En la primera se denunció que mientras la joven volvía a su casa en el barrio de Villa Lavalle, acompañada por su abuela, fue agredida por otras dos mujeres que no fueron identificadas. Las agresiones incluyeron puntapiés en el estómago que causaron la pérdida de un embarazo de dos meses.

La denunciante no es la joven que sufrió los ataques, sino su madre Paulina Acosta. Según comentaron estas fuentes de la policía provincial la mujer se presentó el lunes pasado en la comisaría para denunciar  la agresión que sufrió cuando estaba junto a su pareja. Unos treinta hombres los agredieron y diez de ellos la violaron, contó. Las denuncias fueron hechas en la subcomisaria de Villa Lavalle.

Por estas horas la Unidad de Atención Temprana (UAT), lugar a donde las comisarias derivan las denuncias realizadas, está esperando que lleguen las mismas para después distribuirla al juzgado que corresponda.

La confusión sobre el caso se deja ver también en que, a diferencia de lo que expresan las fuentes policiales, los allegados a las fiscalías provinciales explicaron que en la última denuncia realizada por los ataques se incluyen hechos que sucedieron hace ocho meses.

 Por su parte, el gobierno provincial está bien presente en hechos tan trágicos y confusos como estos: entregó ropa y alimentos a la familia.

Prensa del Gobierno informa que se “asiste a la familia de una mujer que denunció el ataque de una patota. Se resolvió brindar alojamiento a los cinco integrantes de la familia y atención psicológica, además se les entregó ropa y alimentos y se les brindó asistencia jurídica sobre el proceso judicial y policial. Desde que se conoció la noticia de la denuncia por violación que una mujer residente en Villa Lavalle efectuó, el secretario de Derechos Humanos, Martín García Caínzo, ordenó que un equipo interdisciplinario actúe de oficio en el caso y brinden atención a la mujer y a su grupo familiar. Como primera medida se resolvió brindar alojamiento a los cinco integrantes de la familia y atención psicológica, además se les entregó ropa y alimentos y se les brindó asistencia jurídica sobre el proceso judicial y policial. En la entrevista con el equipo, la mujer explicó que no tenían donde alojarse pues a causa de un incendio perdieron las casas donde vivía ella con sus hijos y su hijo con la nuera; también aseguró haber perdido la documentación. El hijo presentaba una lesión en un ojo y manifestaba una pérdida de audición considerable”.

Los hechos, sin embargo, siguen siendo confusos y la información sigue tratándose de ocultar.