Esta semana la institución se vio ensombrecida por la decisión de la nueva gestión de “prescindir” de trabajadores contratados de diferentes áreas.
Pablo Gómez
Sin previo aviso trabajadores contratados que venían desempeñándose en diversas áreas de la Casa de estudios fueron “avisados” que la institución “prescindía de sus servicios”. Esto a días de asumir la nueva gestión y con un video del propio Nina respondiendo “mitos” en plena campaña electoral asegurando que no echaría a los contratados.
El lunes y ante mensajes de trabajadores de la universidad anoticiados que compañeros se quedaban sin trabajo, los gremios APUNSa y ADIUNSa realizaron pedidos de informes a las autoridades. La respuesta oficial vino pronto y al mejor estilo Poncio Pilato aseguraron que “no habían despedido” a nadie y que en realidad a los trabajadores se les habían terminado los contratos y que eso había sido decisión de la anterior gestión.
El comunicado oficial llegó como un chiste de mal gusto, cuando Nina realizó su campaña prometió que no dejaría a nadie sin trabajo.
Con dos notas de respuestas a los gremios, el rectorado de la UNSa comunicó oficialmente que “se garantizan los servicios en las áreas de Comedor, Comunicación, Sistema institucional de educación a distancia (SIED), Equipo interdisciplinario de abordaje de las violencias de Género”. Lo que no aclararon es que las áreas siguieron funcionando para el caso del comedor con sobrecargas de tareas a los trabajadores que quedaron, vaciamiento del área de comunicación, el SIED, y las psicólogas y trabajadoras sociales del equipo de Género que habían asumido por concurso, también fueron desvinculadas.
Para el caso de estas últimas trabajadoras de un área muy sensible, el Rectorado comunicó que la Resolución -CS-500/19 aprobada por el Consejo Superior de la UNSa en 2019 seguía vigente pero que llamarán a concurso para cubrir los cargos. ¿Por qué el rectorado prescinde de trabajadores calificadas? ¿por qué saca de patitas a la calle a trabajadores que venían trabajando para poner a otras?¿Hay persecución ideológica?
No aclares que oscureces
La flamante gestión de Nina y compañía se escudó en que la decisión es legal pero quedaron más expuestos al querer aclarar que no eran “despidos” sino que eran trabajadores prescindibles, descartables, un número más para una prestigiosa institución que funda sus valores en la formación integral y armónica de los integrantes de la comunidad universitaria, docentes, estudiantes, graduados y personal nodocente, “e infunde en ellos el espíritu de rectitud moral y responsabilidad ética y cívica desde una perspectiva ética”, según reza su estatuto.
Nada de esto se respetó y la nueva gestión dejó sin trabajo a trabajadores que además son estudiantes y graduados de la misma institución. Lo que está en juego es la falta de compromiso ético con quienes sostuvieron tareas clave durante años. ¿Por qué es grave?
Porque se enteraron el mismo día. No hubo aviso previo ni diálogo institucional. En un contexto de crisis económica, con más de la mitad de la población de Salta en la informalidad y con indicadores laborales por debajo de la media nacional, la Universidad decide “prescindir” de trabajadores. ¿Ese es el ejemplo ético que una institución tan prestigiosa quiere dar?
Trabajadores de comedores, comunicación, bienestar, género y extensión. Algunos con más de 5 años de antigüedad. Trabajadores de áreas sumamente sensibles en un contexto de desprestigio profundo hacia las universidades que la propia gestión se encarga de enfatizar.
Para mostrar la forma en la que la gestión del Licenciado en Administración de empresas se posiciona, el lunes convocaron a una “conferencia de prensa”, donde asegurarán que no echaron a nadie y la culpa es de la anterior gestión. Lejos de convocar a los propios trabajadores Nina les da la espalda y prefiere hablar con la prensa. Además, se supo que argumentarán que había contratados que no residían en Salta o estaban en Europa. Si eso es cierto ¿Por qué el rectorado no hace su trabajo y detecta a los famosos ñoquis y deja a quienes de verdad trabajan?
¿No hubo transición entre la gestión saliente y entrante? ¿Ninguno de las gestiones velará por los derechos laborales?
Los diferentes pasos en falsos que viene dando la flamante gestión se avizoraron en el discurso de asunción donde aseguró que la universidad posee un déficit millonario. Dijo además que la UNSa sería auditada por esto, generando comentarios despectivos contra la institución. En letra chica queda que el déficit se da principalmente por el recorte de los fondos que envía el gobierno nacional y la auditoría ya había sido anunciada con anterioridad. Datos que fueron totalmente pasados por alto por algunos despistados periodistas que volvieron a pisar la UNSa después de 20 años, en el mejor de los casos.
Pasando en limpio: el rector apenas asumido intentó sembrar dudas sobre el manejo financiero y de gestión del anterior gobierno universitario, acrecentando los discursos de odio hacia la universidad pública.
Fue el ex auditor de la UNSa Contador Marcelo Hegab, quien aseguró que 6.400 millones de pesos de ahorros le dejó la gestión anterior a Nina. ¿En qué gastará ese dinero si no es en los estudiantes, graduados y trabajadores de la institución que dirige?
Convenios que dan que hablar
Para dar cuenta de los manejos de la flamante gestión, un repaso por los primeros convenios firmados deja traslucir el posicionamiento que tiene Nina y compañía. A días de asumir Nina-Martearena y compañía fueron hasta la Universidad Católica y mantuvieron reuniones con sus directivos. Posteriormente la Policía de la provincia tuvo intromisión en la institución a través de la Coordinadora de Bienestar Policial y Penitenciario y Víctor Claros, Asesor del Ministerio de Seguridad y Justicia de la Provincia. La contratación de egresados de la universidad católica por sobre egresados de la propia UNSa, el viraje sutil hacia un arancelamiento de determinadas actividades, el querer difundir que la universidad pública tiene los números en rojo ya es visto como una forma de quitar prestigio a la institución.
Áreas que sí y que no
Según se conoció de forma oficial la UNSa continuará con el Servicio de salud mental “continuidad de todos los servicios y recursos humanos involucrados”, informaron. Los “recursos humanos” que trabajan en el área son egresados de la católica en su mayoría. Para la situación del Programa de Educación en contexto de encierro, se supo que quieren que la Facultad de Humanidades se haga cargo del área y el rectorado una vez más lavarse las manos.
Guardias
En la semana que se conoció que el rectorado dejó sin sueldo a numerosas familias salteñas se conoció que un guardia de seguridad que cumplía sus funciones en la institución murió mientras trabajaba. También se conoció que son trabajadores tercerizados, monotributistas y contratados que ejercen extensas jornadas de trabajo, sin derechos laborales.