La pandemia afecta a los pueblos originarios, se han dado restricciones en todo el país pero eso no evita que los pueblos sigan siendo atacados. El Ejército desarmó un invernadero en la comunidad Millalonco-Ranquehue. (Mario Molina)

De norte a sur, de este a oeste, la realidad de los indígenas es la misma y la pandemia vino a derribar las últimas esperanzas que ya venían desalentadas por la quita de tierras.

La lucha del pueblo mapuche es una de las más activas de Argentina, algunos los señalan como Chilenos, pero la realidad es que ellos habitaron las tierras antes de la delimitación de los países, sin embargo el hacerlos ajenos a la patria argenta, habla de mentalidades que se avergüenzan de tener pueblos originarios en el territorio  pero aplauden cuando un magnate se compra un cuarto del país, algo sin explicación lógica cuando salen a romperse la remera por el patriotismo.

Representantes de las tribus nos comentan sobre un último incidente ocurrido que muestra como el ejército ataca a las familias que buscan hacer emprendiemientos o sistemas de alimentación comunitarios:

Las familias de Villa Los Coihues denunciaron que efectivos de la Escuela Militar de Montaña ingresaron al predio de la comunidad donde se está desarrollando un proyecto intercultural de huerta comunitaria para producir sus propios alimentos.

El Ejército desarmó un invernadero en la comunidad Millalonco-Ranquehue. Así lo manifestó a este medio Laura Rankewe dd Bariloche y trasmitió el siguiente mensaje “Este lunes 05 de octubre, la comunidad Millalonco-Ranquehue y familias de Villa Los Coihues denunciaron que efectivos de la Escuela Militar de Montaña Ingresaron y destruyeron la estructura de 50 mts de un invernadero en construcción que venían trabajando con los vecinos de la zona. También se establecieron con una carpa de campaña”

Por su parte, los vecinos de Villa Los Coihues indicaron que son alrededor de cuarenta familias del barrio que están trabajando con la comunidad Millalonco-Ranquehue. La huerta comunitaria se viene proyectando desde hace un mes.

“Nos avisaron que se encontraba el ejército, vinieron a montar una carpa” en el lugar. “Nos desarmaron un invernadero, un mangrullo y un baño seco” informó con pesar y angustia Juanpa, uno de los vecinos que participa del proyecto intercultural.

El abogado de la Comunidad Millalonco-Ranquehue, Matías Schraer, indicó que la actitud del ejército sobre el espacio comunitario es por lo menos, una situación de falta de información. “En vez de averiguar de quién era el lugar, donde se estaba haciendo una huerta comunitaria, lo primero que hace (el ejército) es ingresar por la fuerza, romper todo y ocupar el lugar”.

Por el accionar de la Escuela Militar de Montaña, el abogado agregó además que la comunidad como las familias del barrio esperan que “el ejército pida las disculpas del caso y ayude a reparar todo el daño”.

Schraer remarcó que “la próxima vez que surja alguna controversia; en vez de actuar intempestivamente, haya primero diálogo ante todo”.

Por la tarde del mismo lunes, los soldados recibieron nuevas directivas de la superioridad y se retiraron del lugar.

Salta

El covid19 se une a la desnutrición, dengue, tuberculosis, infecciones, cáncer entre otras patologías resultantes del abandono para formar la banda de perjuicio a los pueblos que siempre terminan siendo lo que la provincia guarda bajo la alfombra.

Por ejemplo tenemos a la Misión Chaqueña en el norte de Salta, la cual dista a 400km de la capital, es un pueblo de 4 mil habitantes en donde la mayoría son Wichís. Un poco más allá (5km) está la misión Carboncito con casi 2 mil habitantes, para ver el abandono solo basta informar que cuentan solo con una salita y dos enfermeros. Para asistir a ambos pueblos hay un solo médico generalista de 70 años.

Apoyemos a nuestros hermanos, no sigamos permitiendo que esta provincia siga siendo un cementerios de comunidades que son la historia viva de la humanidad, “DIME COMO TRATAS A LOS ABORIGENES Y TE DIRÉ QUIEN ERES”.