Debe ser el único efecto colateral favorable de la crisis económica: sólo 13 personas debieron ser atendidas este 24.
Está claro que esto no es tanto un efecto de la concientización sobre el uso de pirotecnia (porque a pocos les importa que molesten a niños con autismo o a perros), sino una consecuencia
Cinco de los menores resultaron heridos en el ojo, tres en la mano y uno, en el cuero cabelludo.
Solo uno de los pacientes revestía gravedad al tener un ojo comprometido y requirió internación. En el resto se realizaron las curaciones e interconsultas correspondientes, y luego fueron dados de alta.
La médica María Cristina Sorrentino dijo a El Tribuno que había percibido algo muy bueno sobre el uso de pirotecnia: «En los últimos cinco años se ve que vienen disminuyendo las consultas por pirotecnia. De hecho, en años anteriores se veía que a partir del 2 de diciembre comenzaban a consultar por esto y este año, hasta anoche, no tuvimos consultas por lesiones por pirotecnia».