La muerte de una niña por desnutrición volvió a golpear al gobierno. El hecho tomó trascendencia nacional y las críticas a la gestión Urtubey y a los funcionarios responsables volvieron a aparecer.
Debió pasar casi un mes para que la muerte de Brenda Yanet Vega, de dos años de edad, tomara trascendencia y fuera reconocida por el gobierno de la provincia. La pequeña niña wichi vivía en el paraje Medialuna, ubicado cerca de la localidad de Dragones, y falleció el 21 de abril por un cuadro de broncoaspiración, gastroenteritis aguda infecciosa, trastorno metabólico y desnutrición. Un dato agregaba dramatismo al hecho, ya de por sí horroroso: en la misma familia había antecedentes de fallecimientos por las mismas causas.
La noticia se conoció en todo el país en las últimas horas y el ministro de la Primera Infancia, Carlos Abeleira, debió reconocer los hechos, algo que hasta entonces no había dado a conocer. “Somos todos responsables por la muerte de esta niña”, dijo el funcionario. Agregó que “Yanet nos duele a todos” e informó que hay dos mil chicos con bajo peso en toda la provincia. Algunos, en grave estado.
Abeleira informó que la niña “tenía valores adecuados, el médico monitoreaba el estado de Brenda Yanet y de sus hermanos”. Según informó la agencia Telam, al momento de morir la nena pesaba 8,100 kilos y su talla era de 87 centímetros. Un mes antes, el 22 de marzo, anotaron en el registro que su peso era de 10,300 kilos y medía 86 centímetros, mientras que el 19 de febrero pesaba 10,200 y su talla era de 84 centímetros.
La información brindada expresa que la familia se negaba a trasladar a la nena, a pesar de la baja de dos kilos en un mes, por lo que se debió convocar a la Policía. Pero fue tarde, la niña murió en una ambulancia, camino al hospital San Vicente de Paul de Orán. Yanet se convirtió en el segundo miembro de la familia en morir por desnutrición. En 2008, uno de sus hermanos había sufrido el mismo destino.
La muerte por desnutrición en la misma familia fue uno de los motivos de crítica hacia el gobierno. El diputado provincial Tomás Salvador Rodríguez exigió la renuncia de Abeleira a través de Facebook. FM Capital difundió las declaraciones de Rodríguez, quien expresó: “Hay que dejar de mentir y declararse incompetente para el cargo. Por favor Abeleira renuncia y no hagas más daño al gobierno provincial”.
En Radio Nacional Salta, Abeleira expresó: “Estas noticias me tiran abajo, sin embargo sé que con este esquema de trabajo salvamos mucha gente». El miércoles, Abeleira estuvo en Buenos Aires, junto a sus pares de Justicia, Pamela Calletti; y de Asuntos Indígenas, Luis Gómez Almaraz, en el segundo encuentro del Consejo Federal de Ministros de Desarrollo Social, encabezado por la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley.
En boca de todos
La muerte de Yanet se difundió por los principales medios del país. En las últimas horas, todos los portales informativos hablaban de una nueva muerte por desnutrición en la provincia de un gobernador muy mediático, que en los últimos tiempos ha sido noticia por su romance con una actriz y su participación en el programa de Marcelo Tinelli.
“El drama de la desnutrición infantil volvió a sacudir a Salta. Y, esta vez, no hubo forma de disimularlo”, informó el diario Clarín. El matutino porteño agregó que “la desnutrición infantil sigue avanzando en forma silenciosa y se cobra vidas de niños aborígenes, más allá de las acciones del gobierno provincial que, por ahora, parecen ser insuficientes”.
“Abeleira, además, admitió que en enero pasado la chiquita había sido sometida a controles, pero no se pudo prever que podía morir, ante alguna eventual patología, como ocurrió”, expresó el diario cordobés La Voz del Interior.
En Tucumán, La Gaceta aseguró: “Otra niña wichí murió por desnutrición en la misma familia”. “La muerte de una nena de dos años el 21 de abril, oriunda de la comunidad wichi La Medialuna, a 25 kilómetros de Dragones, en el departamento General San Martín, puso en evidencia la vulnerabilidad a la que están expuestos los niños del interior de la provincia”, explicó el santafesino diario Uno.
También en la provincia de Santa Fe, el diario rosarino La Capital aseguró que la muerte de la niña wichi elevó a ocho los casos reportados de niños fallecidos por desnutrición en la provincia de Salta desde mediados de 2014, y que las muertes por mal nutrición registradas en 2014 derivaron en un escándalo político que obligó al gobernador Juan Manuel Urtubey a crear el Ministerio de la Primera Infancia, cuyo objetivo es erradicar la desnutrición infantil.
“Alerta por la muerte de otra niña wichi”, tituló el diario La Nueva Provincia, de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca. En el mismo artículo, agregaba: “Con el deceso de Brenda – 2 años- el martes, Salta se pone otra vez al frente con los casos de desnutrición”.
La Izquierda Diario fue uno de los más críticos ante el hecho. Un artículo publicado el viernes 20 de mayo asegura que el planteo de que la causa de las muertes de estos niños fueron “cuestiones culturales” es una “premisa repetida el año pasado en los medios tanto por el gobernador como por el ministro de Primera Infancia, Carlos Abeleira”.
“Ahora, ante la muerte de Brenda, salen a decir que el problema son las ‘distancias’”, continúa el artículo, que expresa que el gobierno salteño intenta “ocultar el problema de la emergencia sanitaria, habitacional, laboral, que viven las comunidades originarias en el norte de la provincia, empujadas a la miseria con desalojos y represión ante el avance de la agro-industria y el monocultivo”.
El costo
También el viernes 20 de mayo, el diario La Nación publicó un artículo donde asegura que en la Argentina, según la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud, el 7% de los bebés nace con un peso inferior a los 2.5 kilos; el 2,3% de los de entre 6 y 59 meses tienen bajo peso para su edad; el 1,2%, bajo peso para su altura y el 8,2%, baja talla para la edad. El 17 % tiene anemia.
El artículo cita un informe elaborado por el Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil que estima que la desnutrición origina pérdidas de más de 2338 millones de dólares durante la vida de una generación; 8 de cada 10 dólares corresponden a que los trabajadores ganan menos; 1,60 a que los chicos repiten y 40 centavos a que van más al hospital. Agrega que un estudio publicado en 2013 por The Lancet mostró que, para algunos países, por cada dólar que se invierte en erradicar la desnutrición regresan 14 como beneficio.
“El desarrollo cerebral óptimo depende de la provisión suficiente de nutrientes clave en momentos específicos del desarrollo infantil. En particular las proteínas, las grasas poliinsaturadas, el hierro, el cobre, el zinc, el yodo, los folatos, la colina y las vitaminas A, B6 y B12, tienen influencias importantes en las etapas tempranas del desarrollo. Durante los momentos de máxima organización de una función cerebral, los nutrientes son el combustible necesario para poder organizarla y hacerla funcionar”, explicó en la nota el doctor Sebastián Lipina, director de la Unidad de Neurobiología Aplicada Cemic-Conicet.