Calles, ciclovías, plazas, nudos viales, alumbrado y reparación de puentes. Aquí un resumen de la gestión municipal en números para disociar expectativas de realidades y volcar a tierra el discurso publicitario oficial.
En un suplemento de cuatro caras publicado en el diario familiar, la gestión bettinista presentó un resumen de gestión basado en cifras de inversión en obra pública. Bajo el slogan «Estamos Haciendo para que Salta esté mejor», el municipio intenta plasmar la idea de que la gestión está llegando «donde nunca antes se había llegado». La realidad y los planteos de los vecinos de la Capital contrastan de lleno con la infografía oficial.
CICLOVÍAS: $70.000.000
En el universo paralelo del titi-romerismo, los carriles exclusivos para bicicletas que se extienden a lo largo de las calles Alvarado y Belgrano, simbolizan una suerte de maravilla de la modernidad primermundista. Su exaltación a través de la publicidad oficial es justa y necesaria, como así también el hecho de que se hayan «invertido» $70 millones en dicha obra.
A más de un año de su construcción, sin embargo, la funcionalidad de las ciclovías sigue siendo un eje de constante debate. Mientras que la fluidez vehicular se vio menguada considerablemente por la reducción de la calzada, los carriles exclusivos para bicis, son utilizados mayormente por trabajadores de delivery, monopatinadores y hasta motociclistas. Un breve ejercicio de observación en cualquier arista céntrica permite dar cuenta de la escasa utilización de las bicisendas como vía de conexión entre el centro y los barrios. Las rudimentarias estructuras de cemento que cumplen la función de «estacionamiento para bicis» y ocupan buena parte de la Av. Belgrano, pasan la mayor parte del día completamente vacías. Para colmo, según un relevamiento realizado por ediles en la zona centro, la mayoría de los vecinos se opone a la permanencia de las mismas y aseguran no haber sido consultados en su momento. Todo indica que las condiciones de lo real hicieron naufragar la fantasía de la «movilidad sustentable», en la que se gastó casi un millón de pesos por kilómetro.
INTEGRACION DE BARRIOS POPULARES: $450.000.000
A pesar de que la frase fue pensada como un slogan de campaña, la comunicación bettinista sigue aludiendo a «la hora de los barrios». A esta altura, para la mayoría de los vecinos de los barrios olvidados por el ejecutivo municipal, la oración tiene un carácter más provocador que publicitario. Para conexiones domiciliarias de agua, refacciones en CIC’s y limpieza de canales, la comuna resalta que se invirtieron $450 millones. También se indica: «conseguimos 75 millones del Gobierno Nacional» para ampliación de redes de agua y cloaca.
Lo cierto es que, mientras el casco céntrico parece en «estado de obra permanente», los barrios claman por el arreglo de calles y por la concreción de obras prometidas hace meses. Días atrás, el diario de la familia Romero se hizo eco de un accidente provocado por un cráter en barrio El Huayco. El relato de la víctima se reproduce textualmente de la siguiente manera. «En la Municipalidad no te dan bola, en el 147 no te atiende nadie, pero nosotros, los vecinos, tenemos que pagar los impuestos. Eso sí».
A comienzos de año, la situación fue planteada en una reunión con vecinos de Villa Mónica. Allí le pidieron a la intendenta respuestas por la fata de obras de pavimentación y arreglo de calles. La mandataria sorprendió a todos y decidió excusarse retrocediendo seis años atrás en el tiempo: “Nada de lo que hizo Isa sirve”, expresó, enfática, Bettina. “Tampoco Sáenz aportó nada, no tengo un relevamiento de calles asfaltadas, ni de las que faltan asfaltar, así que me voy enterando de nuestros propios informes”.
NUEVAS PLAZAS: $60.000.000
El mantenimiento y la puesta en valor de los espacios públicos tampoco es un fuerte de la gestión romerista. Pese a que se anunciaron inversiones por 60 millones para arreglos en: Plaza España, las moreras & Las Acacias y Vicente López & Miguel Ortíz, los reclamos por la falta de trabajos en los barrios se multiplican cada día. Un relevamiento de la concejal Arroyo detectó falencias en las plazas de: Ciudad del Milagro, Ceferino, Castañares, Limache, Juan Pablo Segundo, El Manjón, Palermo, Costa Azul, Plaza Evita y Barrio Santa Ana.
Por su parte, la edil Laura García consideró a las nuevas plazas construidas por la municipalidad como “corralitos sin luces y con pocos y malos juegos” y con césped “pintado” (el engendro que parieron en el barrio 17 de octubre no podría definirse de mejor manera). Y agregó que lo hacen con fondos de Nación “que manda el dinero para plazas, y no para corralitos”.
REPARACIÓN DE PUENTES: $200.000.000
“Los puentes son claves para una ciudad más segura y conectada. Es un eje fundamental de esta gestión», manifestó la intendenta en ocasión de una recorrida por el detonado puente Vélez Sarfield. En enero de este año, las proyecciones indicaban que la obra de refacción culminaría en agosto. A tres meses de aquel anuncio, las discusiones giran en torno a la pérdida del valor arquitectónico que el viaducto alguna vez supo tener.
Una de las obras presentadas como emblema de la gestión romerista es la construcción del nuevo puente sobre el río arenales, que conectará la zona sur con la oeste. Según aseguran, la obra permitirá mejorar la conectividad y movilidad urbana para evitar accidentes. El presupuesto estimado para tal fin ronda los $165 millones. Pero lo que la publicidad oficial omite es que se trata de fondos del programa nacional Argentina Hace II, que le otorgó este año a la ciudad $400 millones para obras en distintos barrios.
MEJORES CALLES: $280.000.000
Días atrás, este medio publicó un cálculo simple basado en la publicidad municipal sobre la superficie alcanzada por los trabajos de repavimentación. Por entonces, la comunicación oficial hablaba de 32.000 metros cuadrados de nuevo pavimento y 15.000 de nuevo asfalto, lo que llevado a cuadras arrojaba como resultado el triste número de 45 y 21 cuadras respectivamente.
Según datos de Vialidad Nacional, el ancho promedio de una calzada de dos carriles en Argentina es de 7 metros, lo que multiplicado por la longitud de una cuadra (100 mts) arroja una superficie de 700 metros cuadrados -en promedio- por cuadra, sin contar bocacalles.
El cálculo realizado por este medio trascendió las fronteras del papel y se instaló en el recinto deliberativo. Pero lo novedoso es que, recientemente, se conoció la cifra actualizada de metros cuadrados trabajados y los montos invertidos para tal fin. Según el suplemento impreso en el diario familiar, la superficie de nuevo pavimento colocado por la gestión bettinista alcanza los 40.000 m2, mientras que la de repavimentación asfáltica llega a 30.000 m2 y el bacheo de hormigón cubre 55.000 m2. Todo eso por el módico valor de ¡$280 millones! Si se distribuye todo ese dinero en la superficie cubierta por las distintas modalidades de arreglo, habremos destinado $2240 por metro cuadrado o, en su defecto, $1.568.000 por cuadra. ¡Una ganga!
MÁS LUZ, MÁS SEGURIDAD: $25.000.000
Con el correr de los años, el contrato con LUSAL se volvió cada vez más costoso y menos necesario, ya que factura cada vez más y el servicio sigue siendo el mismo. Según el secretario de Ambiente y Servicios Federico Casas, la empresa Lusal tiene a su cargo unas 63 mil luminarias en la ciudad. El director técnico de la firma Benjamín Montellano asegura que, en todo este tiempo, se reemplazaron 61148 de ellas, además de otras 2500 lámparas correspondientes a semáforos. En los barrios, sin embargo, los vecinos cuentan otra historia.
Uno de los reclamos más frecuentes tiene que ver con la semaforización, ya que es deplorable el estado y el funcionamiento de algunos semáforos, con lámparas quemadas y postes en mal estado. Algunos son tan antiguos que no se ven de día, no se cambiaron por sistemas LED, y ni que hablar de la descoordinación reinante de las luces verdes lo que provoca un tránsito lento en la ciudad.
¿Cómo es que la incorporación de cada vez más usuarios al sistema no redundó en una disminución de los montos, considerando que la estructura del servicio sigue siendo exactamente la misma? Al margen de las esporádicas tareas de mantenimiento, el destino de los mencionados excedentes en la recaudación continúa siendo un misterio.
