Personal de un boliche oranense denunció la irrupción violenta de la policía en el local para sacar a todos y agredir a los empleados. La posible razón: hace un tiempo dejaron de abonar la “cuota” para el combustible de los azules.

La denuncia fue realizada en la fiscalía de Causas Policiales y Penitenciarias y en la Secretaría de Seguridad por uno de los empleados del boliche “La Tropi” quien trabaja en boletería. Según esta versión, el sábado pasado se festejaba un aniversario más del local y como regalito cayeron el comisario Néstor Bogarín y sus subalternos Amanda Castro y Díaz Mealla, que prestan servicio de la seccional 20 de Orán, quienes alegaron que la capacidad del boliche estaba siendo excedida y tras forcejear con el encargado de la boletería llamaron a la infantería que se hizo presente para desalojar el lugar. El operativo llevado a cabo con 41 efectivos comandados por el jefe de la Unidad Regional 2, Miguel Angel Córdoba, y sus subalternos los comisarios Cruz Vilte y el nombrado Bogarín.

En su denuncia el boletero aclaró que la reacción de los policías seguramente se debía a que desde hace poco desde “La Tropi” decidieron dejar de abonar los 2000 pesos mensuales destinados a la “nafta” de los oficiales.

“La policía tiene razón cuando hay una situación de delito y aquí no ocurrió ningún delito. Ellos no pueden realizar un operativo con una conducta patoteril. No se puede catalogar a alguien de delincuente sólo porque le guste salir a bailar cumbia y divertirse”, expresó otro de los trabajadores del lugar.