El Frente por la victoria sólo entiende de derrotas. Ayer uno de sus dirigentes amenazó con romper la alianza que llevó a Juan Manuel Urtubey a la gobernación.
Problemas para el gobierno. Ya se le fue el Partido Renovador de Salta. Es verdad que no se ha notado tanto, porque los intendentes renovadores no tuvieron fidelidad partidaria, sino monetaria: sólo responden al que les manda la plata. Pero que ahora el partido de la Victoria, el costado Kirchnerista del gobierno, amenace con dar un portazo es serio. El que emitió la amenaza fue el actual diputado nacional por el Partido para la Victoria, José Vilariño. Dijo que los dirigentes del Partido de la Victoria se sientes abandonados, maltratados y con escasa participación en el Gobierno, a pesar de considerarse el principal aliado del PJ. Vilariño también dijo que buscarán hacer un balance de estos años de gestión y trabajar en estrategias y acciones para los dos últimos años que aún quedan en el poder por ello pedirán una reunión con el Gobernador el próximo jueves. El Partido por la Victoria no tiene un gran peso electoral. Pero sí tiene un gran peso simbólico: es el puente que une al gobierno provincial con el nacional.
