Con la aprobación de la Ordenanza Nº 16.377, el municipio establece un marco legal para servicios como Uber y Cabify, fijando requisitos estrictos para conductores, vehículos y plataformas, y prometiendo una cancha pareja para todos los actores del transporte urbano.

 

Este miércoles se publicó la Ordenanza Nº 16.377, aprobada por el Concejo Deliberante, que regula el Servicio de Movilidad para Usuarios de Plataformas Digitales de Transporte (SeMUPDiT). En palabras simples: Uber, Cabify y compañía deberán ajustarse al nuevo reglamento si quieren seguir operando sin sobresaltos.

La norma, que declara de interés público este tipo de servicios, define con precisión los roles de usuarios, conductores, vehículos y plataformas. El sistema funcionará exclusivamente bajo la modalidad punto a punto, con viajes solicitados únicamente desde las apps habilitadas, descartando cualquier intento de improvisación o práctica informal.

La Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial será la encargada de fiscalizar este nuevo universo rodante. Tendrá poder de autorización, supervisión y sanción, con la promesa de equilibrar la competencia con los tradicionales taxis y remises. A partir de ahora, las plataformas deberán tener representación legal, domicilios en regla, soporte técnico y medidas de seguridad como botón de pánico y geolocalización en tiempo real.

Para los conductores, la vara será alta: licencia profesional, libre de antecedentes penales y con documentación al día. Se prohíben los viajes iniciados por fuera de la aplicación, y las sanciones no tardarán en llegar para los infractores. La norma entra en vigencia dentro de 30 días y el Ejecutivo tendrá hasta 90 para reglamentarla. Como gesto de transición, se otorgarán dos años a quienes aún no cuenten con licencia profesional para ponerse al día. Se acabó el recreo digital.