Se propone la aceleración de un gasoducto que una a Argentina, Brasil y Paraguay, proyecto en el que la ubicación estratégica de Salta juega un papel clave.
El ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo de Salta, Ricardo Villada, y el ministro de Producción y Desarrollo Sustentable, Martín de los Ríos, recibieron a una delegación paraguaya encabezada por el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano, el embajador argentino en Paraguay, Guillermo Nilsen, y empresarios del sector hidrocarburífero. El objetivo de la reunión fue analizar la participación de Salta en un ambicioso proyecto de transición energética que involucraría a Argentina, Brasil y Paraguay.
La delegación paraguaya resaltó la importancia de los recursos energéticos argentinos, particularmente el yacimiento de Vaca Muerta, como fuente fundamental para el proyecto. Bejarano presentó la propuesta de un «gasoducto integrador», un proyecto emblemático para la integración energética regional.
Asimismo, este gasoducto transportará el gas producido en Vaca Muerta hacia el mercado paulista en Brasil, con una importante conexión para abastecer también la matriz energética paraguaya. El viceministro explicó que la ubicación geográfica de Salta, junto con la reversión del Gasoducto Norte, sería crucial para el éxito del proyecto, permitiendo el flujo de gas desde Vaca Muerta hacia el norte argentino y el Chaco paraguayo, satisfaciendo la creciente demanda de gas impulsada por la ruta bioceánica. También, se presentaron proyecciones técnico-económicas del anteproyecto para ilustrar la viabilidad del mismo.
El ministro Villada, por su parte, recordó el histórico rol de Salta como proveedora de gas para el país y enfatizó la importancia estratégica de su ubicación geográfica para la integración energética regional. Destacó que la participación de Salta en este proyecto no solo facilita la integración vial, comercial y aérea con Paraguay, sino que también permitiría una integración energética crucial. El funcionario subrayó que el acceso al gas paraguayo, a través del territorio salteño, traería beneficios significativos para la provincia, especialmente para el sector minero, un gran consumidor de energía.