En el primer día de audiencia en el juicio por la desaparición y “homicidio” de Noelia Rodríguez los imputados se negaron a declarar, pero se inició la ronda de testimoniales, con seis testigos, entre ellos el padre y otros familiares de la víctima.
En la Sala III del Tribunal de Juicio comenzó la audiencia de debate en la causa seguida contra Aldo Darío Vargas y Celia Karina Cardozo por homicidio doblemente agravado en grado de coautores, y Sergio Ramón Villagrán por encubrimiento agravado, en perjuicio de Noelia Yohana Rodríguez.
En el primer día de audiencia se dio lectura a la requisitoria de elevación a juicio formulada por el Ministerio Fiscal. Los imputados, en tanto, se negaron a declarar por lo que sus defensas solicitaron al tribunal que se incorpore la declaración brindada durante la instrucción. A continuación se inició la ronda de testimoniales, con seis testigos, entre ellos el padre y otros familiares de la víctima.
El tribunal está integrado por los jueces Pablo Farah (presidente), María Victoria Montoya Quiroga y Silvia Bustos Rallé (vocales ad hoc).
Las audiencias se extenderán hasta el 24 de junio. Interviene el fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas (UGAP) 2, Pablo Paz. La defensa de los imputados está a cargo de Esteban Martearena (Vargas), Thelma Niederle de Leoni de la UDP 2 (Cardozo) y Guillermo Polliotto de la UDP 1 (Villagrán).
Una sobrina de Noelia contó cómo era la relación tormentosa entre Vargas y su tía. Que varias veces la había maltratado y le quitaba dinero y celulares. “Noelia estaba enamorada de Vargas. Yo vi la mayoría de los mensajes que le mandaba a Noelia. Ese día domingo antes de su desaparición Vargas insistía por mensajes de textos que la tenía que ver frente a la casa de él”
“Vargas -agregó- la maltrataba y ella, aun así no lo quería dejar. Fue su primer novio, Noelia no se cuidaba. En una oportunidad le marco el cuello con exagerados chupones para que ella supiera que le pertenecía. Vargas a mi tía la tenía agendada en su celular como perra. Su mujer, ‘Tutu’ Cardozo, varias veces había amenazado a mi tía. Yo le decía que lo dejara”.
