La intendenta interina echó a 25 personas, a días del final de mandato.

Ignacio Jarsún se desempeñó 1455 días como intendente de Rosario de Lerma. A días de que asuma su sucesor, la intendenta interina “descubrió” «ñoquis» y decidió echarlos.

Sara Gerez notificó a algunos de los despedidos por whatsapp, porque al parecer ni siquiera tenían sus domicilios legales en Recursos Humanos de la comuna.

El viernes se hablaba de que el número de despidos llegaría a 180; pero ayer cerró el número de 45, de los cuales 25 eran “noquis” y el resto personas a las que no se les renovó el contrato.
A los despedidos no se les pagará el aguinaldo ni el mes de diciembre.

«Esto debe quedar bien en claro. De estas personas a las cuales no se les renovó sus contratos, no se sabe cuál era su rol laboral en la comuna. Estamos notificando hasta a los asesores legales que tienen contrato con la Municipalidad de Rosario de Lerma, pero ahora están asesorando la transición de La Merced», agregó Gerez.