La economía familiar está muy deteriorada por la desocupación. Se perdieron fuentes laborales durante el año pasado y esto derivó en una agudización de la crisis de quienes ya venían en situación de precarización e informalidad.
Por Malvina Gareca (1)
Esto hizo que hoy haya muchas más personas buscando una salida para atender sus necesidades diarias de alimento, y, a raíz de esto, aumentaron las ferias barriales y los emprendimientos relacionados con un oficio.
Este es un tiempo diferente, que nos hace reflexionar sobre la resiliencia social. Y por eso debemos, quienes hacemos trabajo social comunitario, y que queremos emprender un camino de representación social, pensar cómo acompañar a estas personas con políticas públicas, acciones concretas y normas que les permitan salir adelante.
Hay experiencias probadas de medidas que podríamos implementar en la ciudad de Salta, como los bancos solidarios de microcréditos, algo que propongo como mano de acceso a financiamientos con tasas accesibles para quienes hoy no tienen posibilidad de ser beneficiarios en otros bancos tradicionales.
A la par, es necesario incrementar los espacios y tipos de capacitaciones laborales que den las herramientas para sumar valor agregado a los productos y servicios, y permitan a los emprendedores insertarse en el mundo laboral con mayor competitividad. Para esto, es necesario replicar la acción de la Provincia y crear la Escuela Pública Municipal de Emprendedurismo que facilite un crecimiento de los pequeños desarrollos productivos que aportan mucho a la economía social.
También debemos comprender un fenómeno social no tan reciente, en el que los jóvenes no tienen una orientación puntual para su futuro profesional una vez que terminan la secundaria. Esto hace que muchos de ellos no consigan encontrar una línea en la cual continuar sus estudios, y tampoco una salida laboral que los ayude a mantenerse en movimiento productivo.
Cuanto más capacitados estén, mayores posibilidades de insertarse en el mundo laboral tendrán en el futuro. Y para las amas de casa u hombres que son sostén de sus familias, los microemprendimientos se convierten en su fuente de trabajo genuino, que, con las herramientas normativas e impositivas eficaces, se transforman en empleos formales que movilizan el aparato económico social.
Tenemos todos, como ciudadanos, una enorme responsabilidad. Podemos generar cambios, podemos salir adelante, pero tenemos que encontrar el camino correcto. En mi caso, junto a un gran equipo de personas comprometidas y con experiencia, queremos llevar estas acciones al plano legislativo, y hacerlas una realidad.
(1) Malvina Gareca. Mamá – Trabajadora y dirigente social y comunitaria – Profesora en Ciencias de la Educación – Directora del MuMaLá Salta- Candidata a concejal por Primero Salta, junto a Arnaldo Ramos y Carolina Am