Los candidatos a rectores Miguel Nina y Julio Nasser aseguraron en medios locales que la UNSa no aprueba un nuevo presupuesto cuando ellos mismos votaron las prórrogas y tienen acceso a toda la información como decanos en el sistema SIU-Pilagá.
Todos los Decanos actuales de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) cuentan con acceso total a la información presupuestaria a través del sistema SIU-Pilagá, al igual que los integrantes de la Comisión de Hacienda del Consejo Superior.
Este sistema permite gestionar de manera integrada el presupuesto, la ejecución del gasto y la recaudación, garantizando la transparencia de la información financiera institucional, aunque los candidatos a rectores Nina y Nasser, actuales decanos y con total acceso y claves, olviden hacer mención en sus entrevistas mediáticas.
De esta manera resulta llamativo que Nina y Nasser manifiesten públicamente una supuesta falta de presupuesto, considerando que, como miembros del Consejo Superior, participaron en la votación para aprobar las prórrogas. Este tipo de afirmaciones solo buscan desinformar a la comunidad universitaria y a la sociedad en general, especialmente en un escenario político.
Desde hace dos años, las cuestiones administrativas relacionadas con el presupuesto universitario han sido resueltas mediante la aprobación de prórrogas por parte del Consejo Superior. Para los ejercicios 2023 y 2024, se aprobaron resoluciones que permitieron atender mensualmente diversos gastos de funcionamiento, todas ellas debidamente aprobadas por el órgano máximo de gobierno universitario, del que ambos candidatos forman parte.
Ley de Administración Financiera
En ausencia de un presupuesto nacional aprobado por el Congreso, rige lo establecido por la Ley de Administración Financiera y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional (Ley 24.156), cuyo artículo 27 indica que, ante la falta de presupuesto, se continuará utilizando el del año anterior con ciertos ajustes definidos por el Poder Ejecutivo.
La Universidad Nacional de Salta se vio obligada a operar con presupuestos prorrogados en 2024 y 2025, debido a la falta de aprobación del presupuesto nacional. Este escenario generó dificultades significativas, ya que los montos resultaron insuficientes frente a una inflación creciente. Aunque hubo aumentos de financiamiento tras las movilizaciones universitarias, el presupuesto elaborado oportunamente por la UNSa no fue tratado en el Consejo Superior por falta de despacho de la Comisión de Hacienda.
A pesar de ello, el Consejo Superior aprobó diversas resoluciones que, en conjunto, constituyen el presupuesto operativo de la institución. Gracias a esta normativa, fue posible garantizar el pago en tiempo y forma de los sueldos, becas, comedor universitario e inversiones.
Acciones dilatorias en la Comisión de Hacienda
Durante el armado del proyecto presupuestario para 2024, la Universidad elaboró una propuesta con el objetivo de optimizar los recursos asignados por Nación. Sin embargo, para ser tratado en el Consejo Superior, dicho proyecto requería el despacho previo de la Comisión de Hacienda. Este despacho nunca se concretó debido a maniobras dilatorias en la Comisión, presidida por el licenciado Miguel Nina, situación que se repitió en el actual ejercicio 2025.
Transparencia en la gestión
En cuanto a la transparencia, el Consejo Superior emitió el 22 de marzo de 2024 una resolución (artículo 6°) que autoriza el acceso sin restricciones al sistema SIU-Pilagá por parte de las autoridades de las unidades académicas. Se entregaron usuarios y claves a los decanos, quienes también integran la Comisión de Hacienda, permitiéndoles consultar en tiempo real toda la información y registros disponibles.