La controvertida fiscal penal Gabriela Buabse, quien había considerado a una niña como «objeto de deseo» retorna como titular del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF).

El retorno de Buabse al CIF reflota actitudes de funcionarias judiciales sin ninguna perspectiva de género.

En 2012 la entonces directora del CIF (Cuerpo de Investigadores Fiscales) Gabriela Buabse firmó un peritaje en el que afirmaba que una niña de 9 años, abusada por el conductor de un transporte escolar, tenía aspecto de mujer y por lo tanto podía ser «objeto de deseo». Posteriormente el entonces gobernador Urtubey la promovió como fiscal penal, pese a la crítica de organizaciones de mujeres que salieron a repudiar sus disposiciones.

En 2019 Buabse volvío a ser cuestionada al imputar a una militante feminista. Se trata de Ana Inés Quinteros Dean imputada por Buabse por el delito de amenazas en perjuicio del diputado provincial antiderechos Andrés Suriani.

Mediante un comunicado, militantes de mujeres brindaron su apoyo a la joven y cuestionaron una vez más las decisiones de la Justicia de Salta en un claro mensaje de disciplinamiento y persecución hacia las feministas.