A pesar de los esfuerzos de Consenso Federal por negar la polarización y su insistencia con la tercera vía, la tendencia a la concentración parece difícil de revertir a dos semanas de las PASO. (Nicolás Bignante)
Los intentos del oficialismo y el kirchnerismo por definir la compulsa electoral sin tener que volver a enfrentarse en noviembre empujan cada día un paso más atrás las aspiraciones de Consenso Federal. Pese a los esfuerzos de Lavagna y su segundo por instalar la idea de una campaña de invisibilización en su contra, los números no muestran otra cosa que lo previsible: Cada día que transcurre hacia las PASO ensancha las dimensiones de la avenida del medio y el impacto se haría sentir en Salta. Los sondeos nacionales, ubican al economista y al mandatario salteño entre los 5 y los 12 puntos con perspectivas de seguir cayendo a dos semanas de las primarias. El índice de polarización, al margen de las interpretaciones del binomio de la tercera vía, escaló al menos 10 puntos desde el anuncio de las candidaturas a la fecha. «Nuestra misión es desafiar, combatir y si es posible derrotar a la perniciosa polarización con las armas legítimas y democráticas del voto» sostienen desde el -por ahora- tercer espacio.
En provincias como Buenos Aires, distrito que representa el 37% del padrón nacional, la concentración de votos en dos candidatos alcanza el 76%. El candidato que compite dentro del espacio que busca romper con la polarización es el marplatense Eduardo “Bali” Buca y mide 2,6% según Synopsis. La situación no es muy distinta en el resto del país incluída la provincia de Salta, donde los candidatos del oficialismo provincial parecen más encaminados a sostener el segundo lugar por encima del macrismo que a disputar el primero con el Frente Todos. Con esta realidad a cuestas, la alternativa de la tercera vía parece reducirse a ir en busca del llamado «voto difícil», por aquel que engloba a quienes rechazan ambas ofertas pero tendrán que decidir entre uno u otro lado de la grieta. Mientras tanto en el gobierno nacional planean una gira de Mauricio Macri por el norte del país que incluirá a Salta, donde apuestan a sacarle algunas voluntades a Urtubey. Dentro del itinerario del precandidato a la reelección están previstas reuniones con Juan Carlos Romero, Gladys Moisés y Miguel Nanni.
Como si faltaran preocupaciones, el enclave disque-progresista de Consenso Federal que incluía al socialismo santafesino y el GEN, entre otros, da pocas señales de organicidad cuando se las necesita. En el distrito de Tres de Febrero, el GEN decidió abandonar el frente luego de que la junta electoral partidaria les impidiera participar en las primarias. «No queremos ser cómplices de lo mismo que venimos combatiendo, una política que en vez de trabajar para cambiar la realidad de la gente, sea apenas el “arte” de la conveniencia para unos pocos” se quejó un referente de ese espacio.
Debilitado tras dos semanas de protestas docentes que lo tuvieron como destinatario directo, el compañero de fórmula de Roberto Lavagna continúa con sus actos alrededor del país en formato conferencia de prensa. Atrás quedaron las pomposas ceremonias donde los animadores y la música centralizaban la atención y los interlocutores eran personas del mismo público dispuestas a contar sus historias. Las dos semanas que restan para el primer acto electoral del año en Salta serán una pendiente para el mandatario salteño y, por extensión, para la pretendida «tercera vía».