¡Oh la política! Ese increíble mundo de las promesas que muchas veces sabemos jamás se van a cumplir.

Por Lola Mento

Este es el caso que nos aboca, reflejado en una gráfica y efectos de photosop impecables, en que el candidato a gobernador Miguel Isa remarca la frase “La creación de fuentes de trabajo, debe ser una prioridad”, como un mensaje distinto del Día del Trabajo.

Suma luego, el ex intendente capitalino entre emojis de fábricas y herramientas, “la generación del trabajo como política de Estado”, resaltando la palabra #convicciones.

De esta forma, el candidato a vice nos vende su campaña, de esas que están bien construidas pero que tanto distan de la realidad y que tiene temas recurrentes que se repiten en cualquier candidato.

O no estamos cansados de que nos prometan a saber: más educación, mejorar el sistema de salud, que todas las personas tengan acceso a los servicios básicos, combatir la inseguridad, más trabajo, combatir el narcontráfico, o luchar contra la pobreza?

Hasta ahí, lo que puede prometer un candidato común y corriente, pero ¿qué salteño puede creer la promesa de un candidato que actualmente es vice gobernador y forma parte de un proyecto político que gobierna actualmente? ¿Será que en el caso de Miguel, los salteños le pagamos su puesto de vice hace casi cuatro años, para que no se le caiga una idea para generar una fuente de trabajo que traiga alivio, y ahora en campaña se le ocurre prometer? Churo ¿no?