A menos de un mes de la fecha en que la municipalidad fijó para el fin de la tracción a sangre en la ciudad, Fredy Flores dice que el plan de reconversión “todavía está en veremos”.

Tras varias idas y vueltas, hace un tiempo que la municipalidad de Salta puso una fecha límite para que los carreros sigan circulando por la ciudad. Esa fecha estaba establecida para el 4 de agosto. Ante esa proximidad, en los últimos días distintas organizaciones se manifestaron: el Movimiento de Trabajadores Excluidos presentó un recurso de amparo y la Agrupación Carreros de Salta dio un ultimátum.

“Si hasta el 24 de este mes no se cumple todo lo que prometieron desde la Intendencia vamos a recurrir a la Justicia”, dijo Fredy Flores, presidente de la ACS, además comentó que no se concretaron las opciones laborales que ofrecieron desde la secretaría de Gobierno: “Los cursos de arte y oficio todavía no se están dictando y no sabemos qué va a pasar con los muchachos que quieren seguir manteniendo el oficio de fruteros, chatarreros y tierreros”, luego sentenció: “Si le quitan el carro, la única que les queda es salir a vender con los cajones y las bolsas al hombro”.

En cuanto a las negociaciones con la municipalidad, Flores aseguró en diario El Tribuno: “nuestra gente se avino a todo lo que le pidieron y colaboró activamente con el censo de las familias que viven de este trabajo, de los caballos y la revisión de los caballos”. En cuanto a su encuentro con el intendente Gustavo Sáenz, el representante de los carreros dijo: “Fue un encuentro ocasional y debo reconocer que me trató con mucho respeto y no tengo por qué dudar de las palabras del señor intendente, pero los tiempos se acortan. El cuatro de agosto está ahicito y eso nos preocupa”.