En los últimos tiempos, Martín Grande hizo una campaña encubierta bastante particular. Se dedicó al escándalo y se puso en contra nada más y nada menos que a la Justicia, pero no a toda la Justicia sino, a la que él, en su estrecha cabecita penso era la más vulnerable.
Porque a la Justicia? Porque para su candidatura a senador provincial no era buena tener alguna mancha en la Justicia local, sobre todo por una causa de corrupción.
Es así que su blanco fue la fiscal Verónica Simesen de Bielke.
El todavía diputado nacional de Juntos por el Cambio, criticó con dureza el accionar de la fiscala en la causa de las facturas apócrifas y ahora también arremetió contra el Procurador General de la Provincia, con quien tendría un encono personal.
Por su parte y en defensa de su empleada, Cornejo declaró “si en un programa televisivo se anuncia que dentro de una semana van a haber noticias en la causa y esa persona es periodista y a la vez diputado nacional, me parece que hay un manejo de la información sensible con una posición dominante diferente a la del resto de los medios…me llama la atención eso”. Y apuntó directamente al ensañamiento con la fiscal Verónica Simensen de Bielke, «casi inédito a nivel país que a una magistrada del Ministerio Público, con una actuación intachable, se la ataque, se la insulte como mujer y se ponga permanentemente en tela de juicio lo que hace”.
El Procurador aseguró que espera que la Justicia actue en la causa de las facturas apócrifas. “Espero que se haga justicia, no importa quiénes sean los nombres». Recordó sus 15 años como juez, al tiempo que dijo no entender el desdoblamiento de la causa en un fraude importante a la administración pública y sin fecha de juicio”.
Todo esto dio inicio cuando el legislador nacional se mostró particularmente crítico tanto con Simesen de Bielke como con Cornejo. «¿De qué se van a disfrazar Simesen de Bielke y Cornejo? Porque Simesen de Bielke y Cornejo son directos responsables de que acá no se haya investigado absolutamente nada”, fue la frase de Martín Grande, aunque cuando la causa lo involucró no le gustó.