El intendente de ese municipio dijo que Marcelo Lara Gros nombró 2.000 empleados entre gallos y medianoche.

Pablo González sí que recibió una pesada herencia: Lara Gros le había jurado que el municipio sólo tenía 1.000 empleados. Pero ahora descubrió que son 2.000. El 80% de los recursos del municipio terminan destinándose a sueldos.
González dijo en Fm Profesional que apenas el 35% de esos empleados pertenecen a la planta, y denunció que el resto pertenece a cooperativas que tenían vencida su personería jurídica hace años, personas sin contrato, o algunos que simplemente cobraban por planillas donde firmaban.
Pese a lo dramático de los números, el intendente informó que no realizará despidos masivos hasta que haya una reactivación de la actividad productiva.
Además de los chotocientos empleados extras, Lara Gros dejó compromisos de pago por 60 millones de pesos para los próximos 60 días, cuando los recursos del municipio son de apenas 50 millones de pesos por mes.
Campo minado.