Ocho de cada diez mujeres argentinas afirmaron haber sufrido algún tipo de violencia de género en su vida, pero menos del veinte por ciento denunció a su agresor, según un estudio del Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos, que funciona en el marco de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

 

Los datos del informe muestran que el 54% de las consultadas reconoció haber sufrido violencia psicológica en alguna de sus formas: discriminación, acoso callejero, acoso laboral, bullying o descalificaciones varias.

En tanto, el 21% indicó haber atravesado violencia económica o patrimonial, entendida como aquel maltrato en el que se les impide trabajar y, además, se les niegan los recursos para satisfacer sus necesidades básicas, mientras que el 18 por ciento reconoció haber padecido maltratos físicos y el 12 por ciento restante dijo haber tenido agresiones del tipo sexual.

 

Entre quienes reconocieron haber sufrido violencia física, el 18% de las mujeres afirmaron que sus agresores «utilizaron un arma o un elemento punzocortante».

La directora ejecutiva del Cipdh-Unesco, Fernanda Gil Lozano, señaló que «se trabajó sobre un cuestionario muy amplio que incluyó preguntas a través de las que se les consultaba a las mujeres si reciben o recibieron a lo largo de su vida violencia física, psicológica, sexual o económica».

 

La investigación subraya que el 85% de los agresores son varones y en el 52% de los casos, quien comete las agresiones es una expareja y en un 25%, la pareja actual.