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No todos somos el Campo

Tras la baja de las retenciones al campo, peligra la inversión pública en al menos 15 provincias por la caída del Fondo Federal Solidario. Salta es una de las perjudicadas por su alta dependencia de esa fondo.

Desde 2009 el FSS otorga recursos a las provincias para destinarlos a financiar obras que acrecienten la infraestructura sanitaria, educativa, hospitalaria, de vivienda y vial y el fondo está constituido por el 30% de los montos recaudados en concepto de derecho de exportación de soja y sus derivados. La decisión de Macri de rebajar las alícuotas de los derechos de exportación de la soja y sus derivados hará que este año ese fondo se reduzca afectando el financiamiento de las provincias.

El Cronista Comercial detalló en una nota publicada hoy a partir de los datos aportados por la consultora Noanomics, que la dependencia del fondo no es igual en todos los distritos y que en 15 de ellos la inversión pública se verá recortada de mayor manera. «las provincias con elevada dependencia del Fondo eran Río Negro (21,1%), Tucumán (20,2%), Santa Cruz (18,7%), Salta (17,5%), Jujuy (17%), Entre Ríos (16,8%), Santa Fe (16,2%), Córdoba (15,8%), Catamarca (14,2%) y La Rioja (13,1%).

A la hora de evaluar el impacto que las bajas en las retenciones tendrá en ese fondo, Noanomics preciso que desde 2009 a 2015, el FSS financió en promedio un 15,6% del total de gastos de capital de las 24 provincias, con un piso de 10,7% en su inicio y un pico del 20,7% en 2010. «Para todo el 2015 el FFS significará casi unos $ 16.000 millones, que habrán servido para fondear un 12,5% de los $ 126.000 millones destinados a gastos de capital que estimamos podrán haberse ejecutado en el año que terminó», explicó el director de la consultora Félix Piacentini.

Según calculan en Noaconomics con un incremento de 4% en la producción para la campaña agrícola de soja en 2015/16, y manteniendo los precios internacionales prácticamente invariables, el FFS de este año podría repartir unos u$s 1480 millones; es decir una caída del 11% interanual.

«Lógicamente las productoras de granos sufrirán relativamente menos ya que la rebaja de alícuotas impulsará sus economías y recaudaciones provinciales. Pero al margen del 2016, en el que en definitiva la disminución en el FFS podría no ser dramática, su progresiva desaparición plantea con mucho tiempo de anticipación el debido reemplazo que todos los distritos deberán realizar de un instrumento que las obligaba a invertir», advirtió Piacentini.

En tanto, desde el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), remarcaron que las provincias fuertemente productoras de soja como Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires van a soportar una resignación fiscal, medida como porcentaje de lo que hubiesen recibido por FFS en ausencia de la medida, relativamente inferior al promedio de todas las provincias mientras que las medianas productoras van a estar en el promedio y las jurisdicciones que no producen soja son las que se van a ver relativamente más afectadas por la reducción.