Mató a su perro de una manera brutal porque aseguraba que en su interior tenía un pequeño ser extraterrestre. Las pericias todavía no determinaron si es un limado o un pelotudo.
Victorino Carmelo Conti (53) era el vecino promedio, un tipo que vivía en compañía de su pareja, y su perro Juan Domingo. Quienes lo conocían aseguran que nada raro se podía avizorar en sus acciones. Sí, de vez en cuando regaba el jardín a las 3 de la madrugada, pero eso es algo que pasa hasta en los mejores hogares.
El caso es que de un día para otro Victorino se puso de los pelos. Dejó de salir a tomar el mate a la vereda, y cambió de vida. Ese volverse taciturno se debía, como se enteraron todos luego, a que en una sola noche se vio tres temporadas completas de Alienígenas Ancestrales de un solo saque.
“Ahí fue que comenzó todo, al otro día ya no era el mismo” aseguró la esposa de Conti, que consternada siguió relatando a El Polichombi: “Todo el día se la pasaba hablando de los mayas, los anunaqui, los tiwanakotas, y el regreso a Nibiru. Yo no le entendía un pingo”, aseguró la mujer que luego comentó que lo que en un principio parecía una locura peculiar, luego derivó en violencia.
“Después de unos dos meses el Carmelito ya estaba perdido, y en todas partes veía extraterrestres, decía que el perro era una nave con forma animal, y que adentro tenía un alien”.
Lo espeluznante sucedió a principios de esta semana, cuando la esposa de Conti llamó al 911 para ralertar de que su marido estaba sacado y apuñalando a Juan Domingo en un rapto de ira gorila interplanetaria. “Lo terminó abriendo como campera al pobre pichicho, porque decía que iba a sacar al extraterrestres que llevaba adentro”.
Si bien algunos proteccionistas se manifestaron en las redes sociales con mensajes tales como “te vamos a cagar a palos pedazo de puto”, hasta ahora ni la justicia, ni los seres de otro planeta han intervenido en el caso.