Se cumplen treinta años de uno de los goles más recordados de Diego Maradona: un tiro libre “imposible” contra la Juventus. El humilde Napoli del sur de Italia empezaba a ser el terror de los poderosos del norte.

Tiro libre adentro del área. Muy pocos metros separan la pelota del arco. En el medio, una barrera que no respeta la distancia. Con los brazos en la cintura, Diego Armando Maradona.

El 3 de noviembre de 1985, el 10 convirtió uno de sus goles más recordados. Fue una parábola matemática dibujada con la zurda, un globo que se elevó y se pinchó en el momento justo. La pelota subió y se metió en el arco de una forma como no se volvió a ver.

Maradona jugaba su segunda temporada con la camiseta del Napoli. Había llegado en julio de 1984, proveniente de un Barcelona que no lo había aceptado por su condición de sudaca que no se quedaba callado. Todos se sorprendieron cuando uno de los jugadores más importantes del mundo pasó a jugar para un club que se había salvado del descenso por un punto.

En la temporada 85/86, el Napoli consiguió el tercer puesto. En la siguiente, salió campeón por primera vez en su historia. Luego llegaría otro título italiano, la Copa UEFA y la Copa Italia, además de un amor incondicional por Diego que todavía persiste.