En su columna dominguera, Horacio Verbitsky aseguró que el rol amistoso que gobernadores como Urtubey poseen con Macri, se explica por la enorme dependencia de las provincias del gobierno nacional.

El análisis del Verbitsky recurre a cuadros generales y otros particulares. Para el primer caso recuerda que “que el conjunto de las provincias sólo financia con recursos propios el 37,41 por ciento de sus gastos, mientras depende de las transferencias nacionales por coparticipación para el restante 62,59 por ciento”.

Tras aclarar que sólo tres jurisdicciones tienen mayor recaudación propia que las transferencias que reciben del Estado Nacional: la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (81,68%); la provincia de Buenos Aires (59,7%) de su presupuesto y Neuquén, con (55,71%).

Entre los segundos, Verbitsky hace un repaso de lo que llama “casos extremos, que explican algunas decisiones políticas que en abstracto serían incomprensibles”: Formosa, Catamarca, La Rioja y Santiago del Estero reciben de la Nación nueve de cada diez pesos que gastan; Corrientes, Chaco y San Juan obtienen por esa vía en torno al 85%; Salta, el 79%; San Luis, La Pampa, Tucumán y Tierra del Fuego arañan el 75%. No es de extrañar que sus gobernantes y legisladores estén entre los mejor dispuestos a acompañar las iniciativas del gobierno nacional, aduciendo que así defienden la gobernabilidad”.

Según el periodista varios de esos gobernadores tendrán una participación destacada en el Congreso que realizará el miércoles el Partido Justicialista. “Entre los aspirantes a presidirlo se destacan tres representantes de este bloque de los menesterosos: el salteño Juan Manuel Urtubey, el sanjuanino José Luis Gioja y el riojano Sergio Casas. Los matices entre ellos giran en torno a si la representación del kirchnerismo en la nueva conducción será moderada, mínima o nula”.