La presentación de los frentes que competirán en los comicios preanuncian un proceso polarizado y dirigido al votante independiente, coincidieron analistas consultados por Télam.

La presentación de las alianzas que competirán en las primarias de agosto próximo y la definición de las fórmulas presidenciales preanuncian un proceso electoral polarizado y dirigido al votante independiente, coincidieron hoy los analistas consultados por Télam.

«El objetivo de Mauricio Macri al elegir a Miguel Pichetto es dar un argumento para que los votantes anti-K del PJ puedan votar a Cambiemos, ahora Juntos por el Cambio», asegura Rosendo Fraga (Nueva Mayoría).

Para el consultor «Macri, de ganar, enfrenta un escenario más difícil que en el primer mandato e incluso puede tener menos bancas en el Congreso que ahora. En este tipo de situación, la negociación con sectores del peronismo será decisiva para gestar acuerdos de gobernabilidad, y en eso Pichetto es experto».

Jorge Giacobbe (Giacobbe & Asociados) aseguró que «todos acumulan para el mismo público. Con Pichetto, Macri apunta al peronismo no K. Y con Alberto Fernández, Cristina Kirchner también. Es como si cada uno quisiera cambiar parte de su PH, de sus formulas, para decir: vieron que no somos tan puros».

«En ambos casos se trata de apuesta por los operadores-armadores sobre los líderes carismáticos», subrayó la consultora Shila Vilker (Trespuntozero), ya que «son elecciones (las de Alberto Fernández y Miguel Pichetto) que buscan dar más previsibilidad y que comparten muchas cosas, como una buena relación con gobernadores e intendentes y con la Justicia. Y que no son resistidos por el mercado».