El dirigente de LLA y parlamentario del Mercosur, Alfredo Olmedo, fue denunciado por la UATRE tras una inspección realizada en una de sus fincas en la provincia de La Rioja. El gremio señaló que durante el operativo se encontraron “condiciones laborales precarias e inhumanas”, incluyendo trabajadores que dormían al lado de letrinas.
El procedimiento fue llevado a cabo por la seccional local de UATRE en conjunto con la Secretaría de Trabajo de La Rioja y el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE). La finca inspeccionada, a nombre de la firma “Alfredo H. Olmedo S.A.”, está ubicada en la capital provincial y emplea a trabajadores migrantes dedicados a la cosecha de aceitunas.
Según el informe, durante la inspección se relevaron 63 trabajadores rurales y se detectaron numerosas irregularidades. Entre las más graves, se mencionan “deficiencias higiénico-sanitarias” en los albergues, lo cual pone en riesgo la salud y la integridad de los trabajadores. Las autoridades competentes labraron las actas correspondientes para formalizar la denuncia contra el empresario libertario.
La inspección forma parte de un plan nacional de fiscalización laboral encabezado por José Voytenco, titular de UATRE, cuyo objetivo es garantizar el cumplimiento efectivo de los derechos laborales. Estas acciones buscan erradicar prácticas abusivas y promover condiciones de trabajo dignas en el sector rural.
Desde el sindicato informaron que, entre enero y abril de este año, se relevaron más de 2.500 trabajadores en distintos operativos realizados en todo el país. Como resultado, se labraron 133 denuncias por irregularidades similares, lo que refleja una problemática estructural que, según UATRE, exige un accionar firme y sostenido por parte del Estado.
Una tradición olmedista:
No es la primera vez que el dirigente amarillo se ve envuelto en una denuncia por trabajo esclavo. En febrero de 2011, tras una inspección de AFIP, se detectó la presencia de obrero viviendo en condiciones inhumanas.
De acuerdo al informe, los trabajadores «dormían bajo carpas de plástico, atendiendo que cuando la temperatura asciende o desciende el lugar se torna inhabitable, y sus colchonetas están a no más cinco o seis centímetros del suelo”. Además, agrega que “la mayoría de los trabajadores, sobre un total de aproximadamente 300 y se esperaba la llegada de 100 más, son de origen boliviano y no completan estudios primarios o secundarios, poseen escasa documentación y quienes la poseen, deben completar algún trámite o reglamentación”.
Olmedo fue citado por la justicia por presunta trata de personas. Por entonces, el dirigente justificó las condiciones de esclavitud a la que eran sometidos los trabajadores por «el efecto de los planes sociales». Como no podía ser de otra manera, también acusó «persecución política» en su contra.