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Las Patas Pilas

Una cuestión simple como es la de aclarar si hubo brutalidad policial, algo que exigiría una investigación seria y que al parecer tiene decenas de testimonios, entró en el fango. El accionar policial del fin de semana en el Centro Cultural “Pata Pila” parece ir por esta senda. Obstaculiza conocer lo que verdaderamente sucedió, mucha mercadería y versiones con aroma dudoso que circuló al comienzo de esta semana.

A más de 48 horas de ocurrido el incidente en el Centro Cultural “Pata Pila”, se mantiene la confusión en torno a lo que sucedió en la medianoche del sábado, como así también en relación a las posteriores repercusiones.

Mientras se espera por las investigaciones pertinentes respecto a denuncias de hechos represivos, llamó la atención el silencio del precandidato a gobernador, Sergio Leavy, sobre lo ocurrido con este evento convocado desde su propio espacio político. Y a pocos metros donde el próximo sábado disertará Cristina Fernández.

En efecto, hasta tanto se dilucide el accionar policial en el local de calle Maipú al 1400, y mientras llegan pronunciamientos con el fin de que estas denuncias por aparente brutalidad policial sean dilucidadas, el principal dirigente de esta coalición aún no se refirió a los hechos. Hay quienes recordaron la reciente luna de miel del postulante por el Frente de Todos, Sergio Leavy, con los uniformados, sector al que prometió incrementos salariales y bonificaciones remunerativas en caso de resultar electo.

Es que la celebración primaveral, aparentemente interrumpida por la Policía de Salta, tuvo como organizadora al colectivo trans, bi y gays, junto con la precandidata a diputada provincial por este mismo espacio, María Pía Ceballos. Con algo de etnocentrismo, el portal de Página/12 replicó una protesta de agrupaciones de este sector y hasta del propio Centro cultural “Pata Pila” contra el gobierno provincial y «hasta el intendente capitalino, Gustavo Sáenz». Cabe aclarar que, a diferencia de lo que sucede en varias Intendencias del Conurbano bonaerense, los Jefes comunales no tienen en Salta poder de mando sobre las fuerzas de seguridad lo cual indica que la acusación es realizada por foráneos que pocos saben de las competencias de la municipalidad de Salta, que lejos está de ostentar el poder de policía.

Otro de los hechos más extraños de lo relatado por el diario metropolitano, es la por demás extraña y, hasta ahora inédita, presencia en el lugar de este operativo de la presidenta del Observatorio de Violencia Contra la Mujer, la polifacética, María Laura Postiglione. Quien dicho sea de paso, también es candidata a concejal por la lista 450 del Frente de Todos.

De acuerdo al relato de P/12, tal parece que la funcionaria del OVCM se encontraba en el lugar donde se hizo el procedimiento “por conocer a una de las víctimas, quien le pidió colaboración”. Es un misterio a dilucidar, por parte del Ministerio de Seguridad provincial, conocer los motivos por los que Postiglione no objetó el procedimiento policial o al menos por qué no respondió a la demanda de esta supuesta conocida, que se lo pedía con la premura que es de imaginar.

En medio de estos huecos argumentales y relatos entre dudosos y contradictorios, se está haciendo cada vez más trabajoso determinar con precisión lo que ocurrió en la medianoche del sábado, muy cerca del estadio Delmi.