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Las 7 vergüenzas de Salta

Nuestros representantes en la Cámara Baja votaron en contra el aborto legal, seguro y gratuito. Los cuatro que hablaron lo hicieron para delirar sobre marsupiales, tumores, Da Vinci y cementerios para fetos; en tanto Kosiner, David y Leavy no emitieron palabra.

En las casi 22 horas de debate en la Cámara de Diputados de la Nación se escucharon intervenciones en contra y a favor, y entre las más insólitas estuvieron las de los legisladores salteños, una de las pocas provincias que tuvo todos los votos en contra de la ley que ahora pasa al Senado, a pesar de esta negativa.

Por ejemplo Alfredo Olmedo, como ya es una costumbre, se mandó un discurso irracional en el que sostuvo: “Yo no voy a permitir pedirle plata al FMI para pagar abortos”. Luego denunció el “negocio encubierto” de las células madre y anticipó que de aprobarse el proyecto iba “a proponer un cementerio para las víctimas de los abortos”.

Martín Grande no se quedó atrás y junto a su par correntina Estela Mercedes Regidor Belledone, dieron cátedra de zoología: Estela Mercedes comparó a bebés con perritos y Martín argumentó: “Los marsupiales terminan su desarrollo fuera del seno de la hembra. Se arrastran y maman durante meses en la bolsa hasta que terminan el desarrollo. Si tendríamos el mismo sistema y los bebés de 10 o 15 cm estarían prendidos a la teta de su madre ¿sería tan fácil tirarlos a la basura como pretenden en el recinto?  Apoyemos la vida, las dos, no una sola” dijo y lo putearon bastante.

En tanto que la intervención verborrágica de Andrés Zottos tuvo algunos elementos confusos, y entre escupitajos el diputado salteño recordó su lugar de origen, luego habló del estado del sistema de salud, termino comparando un tumor con la interrupción del embarazo y para cerrar con broche de oro, citó a Leonardo Da Vinci, como si de un meme se tratara: “El que no valora la vida, no se la merece”, dijo Andrés.

Miguel Nanni fue un poco más recatado, pero aun así su discurso fue vacío, poco y nada dijo para argumentar su postura negativa. Fue algo así como estoy a favor pero voto en contra: “La despenalización del aborto nos ha despertado profundas divisiones… Por primera vez vamos a dirimir una ley no por nuestros colores políticos sino por nuestras sensibilidades o nuestros argumentos y prueba de ello es que hasta último momento estamos viendo cuál es el camino que va a tomar la legislación argentina en este tema tan reñido. Y si esta tan reñido es porque nadie puede decir que tiene una verdad absoluta”.

Los tres legisladores restantes: Pablo Kosiner, Javier David y Sergio Leavy, brillaron por su mutismo. De todas maneras votaron en contra.