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¿La Policía sospechada? ¡Qué sorpresa!

Protesta en Orán para pedir la libertad de los jóvenes detenidos el domingo, después de un supuesto enfrentamiento con los uniformados. Los familiares de los chicos aseguran que todo fue una patoteada policial.

Padres, amigos y familiares de los seis detenidos el domingo en el barrio 20 de Febrero de la ciudad de Orán se manifestaron para pedir su liberación y denunciar que todo fue armado por la Policía.

La información oficial asegura que el hecho sucedió el domingo en la esquina de las calles Paraguay y Mendoza. Allí, un grupo de jóvenes supuestamente ocasionó un desorden en plena calle “alterando el orden y la paz de los vecinos”, según informó ayer El Tribuno. El diario agregó que “un llamado al Sistema de Emergencias 911 alertó sobre lo ocurrido. Policías acudieron al lugar, los jóvenes al notar la presencia policial huyeron por diferentes calles”.

El matutino informó también que “los efectivos realizaron un patrullaje durante el cual los sujetos arrojaron palos y piedras contra ellos y los móviles”. Agregó que los detenidos realizaron una emboscada contra los policías. Un sargento resultó golpeado en el rostro y apuñalado, mientras que otros dos efectivos resultaron heridos por pedradas.

La versión de los vecinos

Sin embargo, los vecinos contradicen a la Policía. Según informó Radio A, manifestaron que fueron los uniformados los que llegaron a un domicilio donde se compartía un asado y comenzaron a disparar y golpear a los presentes.

A través de la emisora, Nahuel, un chico de veinte años, contó que los policías intentaron llevar a los jóvenes que estaban en la vereda de la casa y que cuando estos se resistieron entraron a la vivienda pateando el portón de ingreso y a los tiros atropellaron y golpearon a todos. Agregó que uno de los chicos cayó sobre una botella de vidrio y le produjo un corte a la altura del abdomen que terminó con diez puntos. También que uno de los jóvenes detenidos padece epilepsia y no permitieron a su madre hacer entrega de la medicación.

La doctora Luz María Yamboni, de la Fiscalía, indicó que los jóvenes deberían estar liberados.