Son líneas provinciales y comunales, que aseguran que padecen “una retención indebida de fondos” de parte de la administración de Axel Kicillof. En estos momentos, micros interrumpen la circulación frente a la sede gubernamental, en la capital bonaerense.
Los micros estacionados frente a la Gobernación en señal de protesta por la falta de pago de los subsidios que corresponden a Provincia. 200 colectivos son parte de una fuerte protesta de empresarios del autotransporte de pasajeros en estos momentos frente a la sede de la a la Gobernación bonaerense.
Según pudo saber Primer Plano Online, los manifestantes le reclaman al gobernador, Axel Kicillof, y al ministro de Transporte provincial, Jorge D’Onofrio, por la falta de pago de los subsidios a líneas que realizan recorridos provinciales (de 200 a 499) y comunales (de 500 para arriba).
“Hay una retención indebida de fondos”, aseguran desde el sector empresario que en estos momentos se manifiesta sobre la calle 6, en la capital provincial, e interrumpe el tránsito en esa arteria porque los micros se estacionaron allí.
El universo de empresas alcanzadas por el conflicto
El universo de empresas alcanzadas contempla un total de 8600 colectivos nucleados en 130 compañías transportistas, muchas de las cuales no pudieron hacer frente al pago del aumento acordado con el gremio Unión Tranviarios del Automotor (UTA). Según reclama el sector, la deuda que mantiene la administración bonaerense asciende a los $28.180 millones.
Desde hace varios días que las Cámaras de Transporte advierten que no pueden pagar la totalidad de los sueldos del mes de diciembre con el aumento acordado con el sindicato, y hasta informaron que el medio aguinaldo podrán abonarlo en cuotas.
“Los ingresos de las empresas están totalmente regulados por el Estado a través del costo del pasaje y de los subsidios”, explicaron en un documento. Por eso, ante la imposibilidad de aumentar los boletos y la negativa del Gobierno nacional de otorgar mayores costos a modo de compensaciones indican que el sector “atraviesa una crisis nunca antes vista”.
Según estiman, el pasaje que cada persona que viaja debería afrontar es de $1.300 para la prestación del servicio, aunque el boleto promedio es de $370 y las compañías llegan a $870 de ingreso por los subsidios. Hay casi $500 que nadie paga y que provocan un agujero negro en el sector.