Durante el acto por el General Güemes, una gresca entre dos perros envió el protocolo al tacho y convirtió al solemne evento en una escena digna de una película costumbrista, con ladridos y un vicegobernador desesperado por espantar la jauría.

Todo iba según el protocolo: Juan Manuel Urtubey, abrigado con un inevitable poncho salteño, estaba de pie, al lado del mástil. A su lado, el vicegobernador Andrés Zottos hacía las veces de ayudante y sostenía la Bandera argentina que estaba a punto de elevarse a los cielos para desplegarse y así homenajear una vez más a Martín Miguel de Güemes.

Justo cuando comenzaba a sonar “Aurora”, esa oda a la Bandera nacional, también se desató la hecatombe. Dos perros comenzaron a pelearse al lado del mástil, entre el gobernador y el vice. Ladridos, súplicas en forma de llanto perruno y gruñidos revueltos, un demonio de Tasmania del combate canino, se llevaron el protagonismo durante treinta segundos.

Un video, publicado en la cuenta de You Tube del diario El Tribuno, muestra la escena claramente: mientras los perros se pelean, Zottos protege la Bandera, el gobernador continúa el izamiento como el alumno más aplicado y aprovecha para tirar una leve patada con su pierna izquierda. El vice también aporta puntapiés, aplaude como las viejas de barrio para espantar el caos de su vereda.

Luego, mientras Urtubey continua izando la bandera con una sonrisa, Miguel Isa mira de cerca y Zottos se mantiene más atento a la pelea que al acto, militares, custodios, gauchos y otros intentan separar a los perritos, hasta que finalmente lo logran.