Se dispuso que la sentencia en el debate oral y público por el femicidio de Claudia Judith Palma en mayo de 2013 en Joaquín V. González, se dicte la próxima semana y no este viernes como estaba previsto. Los tres abuelos detenidos y acusados de abuso sexual y homicidio, en sus declaraciones, negaron haber visto a la niña. (Andrea Sz)
Los “tres abuelos” detenidos e imputados son José Insaurralde (47), Ramón Leiva (67) y Rubén Sixto Soria (83), presuntos responsables de los delitos de abuso sexual con acceso carnal y homicidio agravado. En la última jornada de las declaraciones testimoniales que culminó con la de los tres imputados, ninguno afirmó haber visto a la niña de 9 años.
El juicio comenzó el 19 de este mes, los días 22 y 23 el Tribunal presidido por la jueza Mónica Mukdsi se trasladó a Joaquín V. González donde se realizó una inspección ocular. El primer día, antes que la madre de Judith declarara, el octogenario Rubén Sixto Soria, en un hecho confuso, manifestó su voluntad de hablar y “decir la verdad”, luego sus abogados Luis César Fernández y Aldo Molina, adujeron que el abuelo pasaba por una supuesta confusión. Finalmente el acusado fue retirado de la sala, mientras Antonia Quiroga, la madre de la niña, declaraba.
El día 2 del juicio los peritos de Criminalística presentaron pruebas que incriminaron a los tres detenidos por el femicidio. No sólo dieron cuenta de la sangre encontrada en una de las casas, sino también de todo el material pornográfico que les fuera secuestrado a los abuelos. Ese día también declararon quienes intervinieron en nombre del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF).
Pueblada
El pueblo de Joaquín V. González se unió por una causa: pedir justicia. La población no sólo ayudó con la búsqueda de la pequeña cuando los padres denunciaron su desaparición sino que además, en numerosas marchas, acompañaron a la familia de la niña. Aquel 18 de mayo de 2013 fueron dos niños quienes dieron aviso a la policía de que el cuerpo de Judith yacía en un descampado a pocas cuadras de su casa, en la misma manzana que vivían los detenidos y muy cerca del almacén donde fue vista con vida por última vez.
La encontraron a las 18.30 del día siguiente que se radicó la denuncia. Efectivos de la Regional 5 de Joaquín V. González y policías de las zonas aledañas: Gaona, Lajitas, El Galpón y El Quebrachal, tardaron 24 horas en encontrarla.
Judith era la mayor de cuatro hermanos, siempre salía en su bicicleta a vender bollos que su madre hacía en la casa, una humilde vivienda del barrio Juan Pablo II, en el sudeste de la localidad. Habitualmente lo hacía acompañada de uno de sus hermanitos, pero ese día salió sola. La madre denunció la desaparición esa misma noche. Cuando encontraron el cuerpo de la niña presentaba golpes, signos de abuso y una herida cortante en el cuello, que después se determinó fue con un cuchillo de cocina. Muy cerca estaba abandonada la bicicleta.
Todo el pueblo conocía a Judith y a sus asesinos, “los abuelos perversos”. Los tres hombres vivían juntos, y -según fuentes del juzgado- tienen lazos familiares entre sí: Roberto Sixto Soria es padrastro de Ramón Leiva que a su vez es cuñado de José Insaurralde.
Según se supo, la niña fue llevada al lugar donde la mataron con el engaño de comprarle el pan. Durante el rastrillaje, que incluyó perros, se descubrieron manchas de sangre que permitieron ubicar la casa de uno de los sospechosos e identificar al presunto copartícipe del asesinato, que habría sido perpetrado en un taller. Los tres estaban alcoholizados, lo que explicaría la saña con la que agredieron a la víctima. Se estima que el cuerpo de la niña fue arrojado en el lugar el mismo día de su hallazgo y que el asesinato se habría cometido en el taller de uno de los detenidos, por el rastro de las manchas de sangre encontradas.
Gerardo Díaz, jefe de la Brigada de Investigaciones de J.V. González dijo que todos los caminos de la sangre confluían en el patio de la casa del anciano Soria; dijo además que revolvieron el basural municipal para rescatar el arma homicida. Asimismo el comisario Díaz aseguró que “Judith tenía en uno de sus muslos la marca de un mordisco realizada con una prótesis dentaria”.
Sentencia
La Sala Primera del Tribunal de Juicio dispuso que la sentencia en el debate oral y público por el femicidio de Claudia Judith Palma, se dicte la próxima semana y no este viernes como estaba previsto. Conforman el tribunal la jueza Mónica Mukdsi (presidenta) y los jueces Martín Pérez y Héctor Alavila (vocales).La defensa de los imputados está a cargo de los letrados Luis César Fernández y Marcos Molina. El agente fiscal penal actuante es Justo Vaca, y el actor civil, Ramón Hadad.
Después de la declaración de todos los testigos, la situación de los acusados no ha variado mucho. Todos coincidieron en señalar a los detenidos como los responsables del macabro hecho.