El fin de la brecha salarial y la violencia de género fueron los principales reclamos de las mujeres suizas que llenaron las calles en todo el país.
Este viernes decenas de miles de mujeres salieron a las calles en Suiza para exigir la igualdad real, el fin de la discriminación salarial, medidas de conciliación y tolerancia cero ante la violencia de género.
La huelga general de mujeres se realizó 28 años después de que medio millón de mujeres protagonizaran el primer paro general para reivindicar sus derechos.
“Las mujeres cambiamos la sociedad. Ahora”, expresaba la pancarta que encabezaba la movilización en la capital, Berna.
Hubo movilizaciones en todo el país durante todo el día bajo el lema más “sueldo, tiempo y respeto”.
“Nos hemos dado cuenta de que las cosas no han cambiado desde 1991. La igualdad es un derecho constitucional que no existe de manera real, material, efectiva, para las mujeres”, dijo Tamara Knezevic, organizadora de una de las marchas en Zúrich, según cita El País de Madrid.
“Todavía hay muchas desigualdades que debemos cambiar. En Suiza hay mucho sexismo y prejuicios que sufren las mujeres frente a los hombres’”, agregó por su parte una educadora en la manifestación de Ginebra.
“El 14 de junio de 2019 entrará en la historia reciente de Suiza como la mayor manifestación política”, afirmaron desde la Unión Sindical Suiza.
Las que no pudieron hacer huelga todo el día, fueron convocadas por las organizaciones feministas a trabajar hasta las 15H24, hora a partir de la cual las mujeres trabajan gratis si se tiene en cuenta la desigualdad salarial media del 20%.
Para los empresarios se trató de una huelga “ilegal” debido a que no fue por motivos laborales y a la instauración en 1937 de la “paz del trabajo”, una convención firmada por la patronal y los sindicatos que excluye el recurso a la huelga en beneficio de la negociación.
La igualdad de mujeres y hombres se introdujo en la Constitución suiza en 1981, pero una década después, apenas se habían producido avances, lo que llevó al primer paro general el 14 de junio de 1991.
La ley de igualdad llegó cinco años después, la despenalización del aborto en 2002 y las 14 semanas de permiso de maternidad en 2005, sin embargo no hay permiso por paternidad y la crianza, así como el cuidado de los mayores, sigue recayendo sobre las mujeres.
Según los datos de la Administración federal seis de cada 10 trabajadoras, pero solo 1,8 de cada 10 hombres, tienen un empleo a tiempo parcial, justamente para poder llevar a cabo las tareas de cuidado, lo que conduce a pensiones más bajas, menos oportunidades de formación y de carrera profesional.