El pre-candidato a presidente de la Nación por el Frente Popular, Víctor de Gennaro, recorrió la provincia y habló con Cuarto Poder de sus orígenes peronistas, las críticas al modelo K, las enseñanzas que los pueblos originarios aportan al conjunto nacional y defendió un tipo de desarrollo integrado a Latinoamérica. (Daniel Escotorin)
Llegó desde Tucumán, acompañado por Evangelina Codoni, una joven militante santafesina proveniente de las filas de la juventud de la Federación Agraria. Víctor de Gennaro ya no necesita mucha presentación, salvo recordar tal como le gusta a él, que sigue viviendo como desde siempre en su barrio natal de Lanús. El “tano”, como le dicen sus compañeros y amigos de vida y militancia, transmite energía, entusiasmo, charla, habla, escucha, atiende, responde, se ríe, habla en voz alta, no pierde atención de su entorno. Acompañado por sus referentes locales recorre Salta. Es pre-candidato a presidente de la Nación por el Frente Popular.
El jueves estuvo en Rosario de la Frontera, desde allí marchó a Metán pero hizo un intermedio en El Galpón y se reunió con los dirigentes del “tranquerazo” la movida local que busca frenar el proyecto minero de Austin Powder, para recalcar que los recursos naturales siguen en manos extranjeras. De Gennaro propone ampliar la democracia darle voz a la ciudadanía, al pueblo y que decida sobre el destino de sus recursos estratégicos, los “bienes comunes”, para que Argentina construya y recupere su soberanía productiva. Pasó por General Güemes y llegó a la Capital.
De Gennaro conoce Salta, de hecho estuvo en las elecciones provinciales de abril (PASO) y de mayo (general) apoyando al entonces candidato a gobernador el Dr. Edmundo Falú, quien hoy se postula como precandidato a diputado nacional en primer término, acompañado por María Lapasset en segundo lugar. Sabe de sus riquezas como también de sus miserias, de la pobreza como flagelo y el hambre como “un crimen planificado para someter al pueblo”; de la pobreza se sale con más participación y “creando tres millones de puestos de trabajo genuino”.
Denuncia entonces que “en Argentina 6 de cada de 10 jóvenes son pobres, y de 10 que trabajan, 6 son precarizados: les roban el futuro, los condenan desde el presente”. “precarización, represión o drogadicción. Eso es todo lo que el sistema le ofrece a la juventud, por eso me acompaña Evangelina (Codoni – 32 años) como pre-candidata a la vicepresidencia. Porque los jóvenes tienen un lugar ganado en la lucha por la dignidad”. Con esos tres millones de nuevos trabajadores podemos acabar con el hambre, garantizar seguridad y formar una generación comprometida con un modelo de Desarrollo basado en la producción y el conocimiento, para eso se necesita un Estado activo, democrático y transparente: la corrupción viene de arriba” sintetiza.
Junto a Codoni refuerza la idea de “shock de trabajo genuino”. “En Argentina hay millones de hectáreas de tierra ociosa por pura especulación financiera e inmobiliaria. Vamos a crear un millón de chacras (pequeñas propiedades) para fomentar el trabajo y la producción regional y así evitar la migración constante de jóvenes a la ciudad, a la exclusión, a la pobreza”.
La crítica al gobierno es concreta, contundente: en su visión el país tuvo la oportunidad histórica por sus niveles de crecimiento económico de haber terminado con la pobreza y no lo hizo “su relato es puro verso, producimos alimentos para 400 millones de personas y se nos mueren los pibes por todos lados” remata indignado. Los candidatos del poder Scioli, Massa, Macri significan para de Gennaro volver a lo peor de los noventa. Unidad Popular (UP), su partido, surge luego de la implosión del FAP que en el 2011 salió segundo detrás de CFK. La decisión de los otros partidos (PS, GEN, Libres del Sur) de aliarse con la UCR, responsable junto al PJ del neoliberalismo de los noventa llevó a romper y conformar un nuevo frente. La debacle de ese progresismo es la muestra, expresan los referentes de UP, que estaban en el camino correcto al formar el Frente Popular con diversas fuerzas distritales y nacionales entre ellos el PTP. “fueron funcionales al poder y por eso hay que animarse a construir algo nuevo, algo distinto” dice Victor de Gennaro, algo de esto sabe. De hecho fue el mentor allá por 1991 del proyecto que partiría al movimiento obrero, rompiendo con el monopolio sindical de la CGT para formar lo que sería la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) que marcó un hito en la resistencia al menemismo en los noventa.
Se diferencia también de la izquierda, se imponen su propio techo desde su sectarismo, define y agrega, “hoy hay nuevos modelos, nuevas culturas políticas: muchos de nosotros provenimos del peronismo, pero no alcanza, de la izquierda también, pero hay nuevos desafíos: el medio ambiente o sea, nuestros Bienes Comunes, y allí están nuestros hermanos originarios, que no son piezas de museos, están vivos, pero el sistema los quiere muertos. Ellos nos enseñan sobre el respeto a la naturaleza, la Pachamama”. “Nuestro desarrollo va de la mano de un modelo integrado con nuestros hermanos latinoamericanos, esa Patria Grande, el continente de la esperanza”, dice, y recuerda las palabras de Francisco en Santa Cruz. En Bolivia y en Ecuador hablan del Buen Vivir, o sea de esa sociedad justa, equitativa con desarrollo pero en equilibrio con el medio ambiente.
Luego de la conferencia de Prensa del viernes por la mañana, recorrió el centro, charló con los transeúntes locales y turistas, locuaz, extrovertido, junto a Falú, Lapasset, Monzón (pre-candidato al Parlasur) y otros referentes y dirigentes del Frente Popular. Por la tarde recorrió Villa Primavera e inauguró una sede del Frente en el barrio Leopoldo Lugones, frente a Castañares, donde para sorpresa de esos vecinos, al tomar contacto nada menos que un candidato a presidente. “no hay transformación sin protagonismo, no creamos el verso de que uno puede resolver todo, o nos animamos a lo diferente, o seguimos igual” sentenció y se ganó el aplauso de la concurrencia.