Aseguran que en la asamblea que reeligió a Carlos Alberto Diez San Millán como presidente de la Agrupación Tradicionalista “Gauchos de Güemes” hubo más votos que votantes. (Gonzalo Teruel)
Hace un par de años y de mucho tiempo de intentarlo, Carlos Alberto Diez San Millán consiguió lo que él y otros gauchos de prominentes apellidos querían: mudar el predio de campo de la Agrupación Tradicionalista de Salta “Gauchos de Güemes” desde La Isla a Lomas de Medeiros. Para ello, claro, tuvo que insistir e insistir en la conveniencia de permutar el predio del sur de la capital provincial por obras en el terreno cedido por el gobierno en el oeste. Y, además, tuvo que forzar la aprobación de tal acuerdo por parte de una asamblea extraordinaria de la institución gauchesca.
Sin prosapia ni abolengo, no pocos socios denunciaron el perjuicio patrimonial que suponía desprenderse de un terreno valuado entre $12 y $15 millones por algunos y de entre $10 y $12 millones por otros a cambio de “obras” por un valor menor a $6 millones. En una asamblea que quedará para los anales de la institución la singular operación inmobiliaria fue autorizada en el año 2015.
Tiempo después, a fines de noviembre del año último, una nueva asamblea reeditó las diferencias entre la tropa de San Millán y los gauchos de menor linaje. Lectura incompleta de los puntos a votar y escasa información, socios habilitados a opinar y votar pese a estar inhibidos por la normativa vigente, y una presencia inusual de votantes para la renovación de autoridades son sólo algunas de las particularidades que arrojó la cita institucional.
Víctor Hugo Campos, aquel que había llevado la voz cantante contra la venta del predio de La Isla y la construcción de un salón de fiestas en Lomas de Medeiros, volvió a cuestionar las formas de la asamblea que ratificó a Diez San Millán al frente de los “Guachos de Güemes”.
En diálogo con Cuarto Poder protestó porque, contrario a lo que manda el Código Civil y Comercial, aquellos socios con cuotas impagas fueron autorizados “con voz y voto” a participar de las deliberaciones y por la intensión de otro influyente gaucho, el exministro de Educación Leopoldo Van Cauwlaert, para aprobar sin discusión y en un mismo acto la Memoria Anual, el Balance General e Inventario, y el Informe del Órgano de Fiscalización.
Y aseguró que los socios se quedaron con ganas de conocer el real estado económico y financiero de la institución tradicionalista. “San Millán, en tono irónico, informó que las construcciones realizadas en Lomas de Medeiros valen hoy más de $20 millones y el terreno de La Isla vale, exactamente lo mismo que hace 2 años o sea $7,5 millones” dijo Campos y planteó que quién ejerce profesionalmente como tasador (San Millán) está “totalmente confundido al revalorizar la construcción y depreciar el valor de los bienes raíces”. “Mi criterio es a la inversa o sea los bienes raíces se revalúan y los inmuebles se deprecian. Puedo asegurar con certeza que el predio de Velarde hoy supera una valuación de $40 millones pero no aclara el origen del valor asignado por él al predio de Velarde, ya que en el boleto de compra/venta se estipula $5.994.252,20”, precisó.
Además, denunció que las cifras del balance leídas ante el auditorio por la contadora Wilma Dorado no fueron transcriptas en el acta de asamblea “por lo cual seguimos ignorando la real situación económica y financiera de nuestra institución”. “Con respecto al inventario nada se dijo, por lo que tampoco conocemos la realidad sobe nuestros bienes y en consecuencia el verdadero estado patrimonial” advirtió. El balance, según porfió Campos, no fue aprobado porque contó con el aval de 52 votos a favor, menos de la mitad de los 132 gauchos presentes en el lugar al momento de su debate.
El indómito Campos reveló otra singularidad de la asamblea: destacó y avaló “la creación del Fortín Capitán Diego Cala de la localidad de Puesto Grande del Marques en la Quebrada de Humahuaca”. “Se comete un grave error con la creación de fortines fuera de la provincia porque nuestra personería jurídica fue otorgada por decreto provincial y tiene vigencia dentro de la provincia” explicó y advirtió los peligros jurídicos de llevar el poncho salteño fuera de la provincia sin autorización legal. “Nuestra institución está registrada como Agrupación Tradicionalista de Salta Gauchos de Güemes y por lo tanto los fortines deben ser de Salta. Por curiosidad revisé el padrón correspondiente y encuentro instituciones de otras provincias como fortines de la agrupación y me parece intolerable ya que están regalando nuestra propia identidad de gauchos salteños y a su vez habilitando a gauchos del Chaco, Jujuy, Santiago del Estero y Tucumán a tener representación y voto en las asambleas para elección de autoridades de nuestra institución” reclamó con un espíritu tan conservador como el de San Millán o Van Cawlaert.
Si llegaron de todas esas provincias para votar en la asamblea, Campos no lo dijo. Pero aseguró que el número de votantes por la continuidad de San Millán y sus colaboradores fue llamativo. “El resultado fue de 167 votos para la lista oficial y 95 votos para la lista opositora lo que hace un total de 262 votos emitidos” informó y preguntó “por qué hubo 132 asistentes a la asamblea y 262 votantes, es decir prácticamente el doble”. Él mismo se respondió y reflexionó que “es porque los asistentes a la asamblea son los socios que realmente valoran la institución y tienen real interés en que la misma cumpla su cometido y preserve y aumente su patrimonio pero los que concurren solamente a votar son o que no tienen interés o afinidad con la institución y son socios solamente para aportar un voto de compromiso por amistad o favores recibidos o promesas de favores a recibir”.
La muy variante presencia de gauchos en la última asamblea, el 27 de noviembre, dejó en evidencia la falta de rigor administrativo por parte de San Millán y sus compañeros de gestión. “Es realmente irritante ver que si en la asamblea estuvieron presentes 132 asambleístas, en las votaciones puestas a consideración hayan participado según el acta y al margen de las elecciones, 6 en una y 52 en otra” dijo Campos y protestó porque “más indignante es que para las elecciones de autoridades hayan votado 262 personas, es decir el doble de asistentes a la asamblea”.