Bajan retenciones a la soja. El dinero es equivalentes a la plata que dejan de percibir en 2018 los jubilados y pensionados que cobran el haber mínimo, incluyendo el “bono compensatorio”.

El presidente Mauricio Macri justificó la reforma previsional con el argumento del “cuidado de los abuelos y de los chicos”. Sin embargo, los números le dan la espalda. Se estima que el año que viene (cuando se paga el bono compensatorio por única vez) sólo el universo de jubilados y pensionados dejaría de percibir más de 50 mil millones de pesos en concepto de haberes a raíz del cambio de fórmula de actualización en relación a la que rigió desde 2009. A diferencia de esa poda de ingresos en los sectores más vulnerables (ver nota principal), el campo, las mineras y otros sectores del empresariado se vieron favorecidos por la política tributaria del Gobierno.

En paralelo a la sanción de la reforma previsional, la Bolsa de Comercio de Rosario divulgó un informe en donde señala que la rebaja de 6 puntos porcentuales prevista para todo 2018 de las retenciones al complejo sojero “podría implicar una caída de 1000 millones de dólares en los recursos del gobierno nacional”. Se trata de casi 18 mil millones de pesos. Según los datos elaborados por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), esos 18 mil millones de pesos que embolsan los sojeros (que nadie duda están en la cima de la pirámide de ingresos) son equivalentes a la plata que dejan de percibir en 2018 los 3.546.513 jubilados y pensionados que cobran el haber mínimo de 7246 pesos, incluyendo el “bono compensatorio” que definió el Gobierno.

En total, la eliminación de retenciones al trigo, maíz y girasol, entre otros, y la rebaja para la soja implicó una pérdida de recaudación de 52.913 millones de pesos en 2016, según los datos de la Jefatura de Gabinete, que equivalen a 64 mil millones de pesos actualizados por la inflación de 2017.

Otro de los cambios tributarios fue la baja de la alícuota de Bienes Personales desde el 1,25 por ciento en 2015 hasta un insignificante 0,25 por ciento el año que viene. Según datos de AFIP, en 2015 se recaudaron 18.210 millones de pesos en concepto de ese tributo. Si se hubiera mantenido la alícuota y la cantidad de contribuyentes, la actualización de ese monto en función de la inflación en 2016 y 2017 da como resultado 31.357 millones de pesos. Ese monto supera al recorte de 400 a 800 pesos por hijo que sufren por año los beneficiarios de la AUH y demás asignaciones familiares. Bienes Personales no afecta a la cadena de producción (grava el patrimonio) y se considera uno de los pocos impuestos de carácter progresivo de la estructura tributaria.

En el caso de la minería, la eliminación de las retenciones en 2016 implicó una pérdida de recursos tributarios del orden de los 3771 millones de pesos en función de la información que brindó al Congreso el jefe de Gabinete, Marcos Peña. Equivalen a unos 4500 millones de pesos al tipo de cambio actual. Esa cifra supera holgadamente el ajuste total de 2500 millones de pesos por año que sufrirán los jubilados que cobran la mínima y cuentan con 30 años de aporte (a quienes se les garantiza el 82 por ciento móvil y el bono de 750 pesos). En el mismo sentido juega la rebaja de las cargas patronales sobre una porción de la masa salarial.

Fuente: Página 12