Hoy se despidió en el aeropuerto a Cristina Lera y su hija Mirian, quienes mañana desde Buenos Aires parten a Malvinas a visitar la tumba de nuestro héroe Luis Guillermo Sevilla, cuyo cuerpo fue recientemente identificado en el Cementerio de Darwin.
Oriundo de Rosario de la Frontera, nació el 17 de septiembre de 1963. Al cumplir los 18 años fue sorteado para cumplir con el Servicio Militar Obligatorio y le correspondió incorporarse a la Fuerza Aérea Argentina, siendo destinado a la Escuela de Aviación Militar.
Al producirse el conflicto del Atlántico Sur, se lo destinó a la Base Aérea Militar Cóndor donde cumplió funciones de Seguridad y Defensa. Cristina recibió solo dos comunicaciones. La primer alertaba que estaba en combate, y la segunda, que su hijo había fallecido.
En 2015, la hermana de Luis fue a Malvinas, y en una cruz estaba el nombre de Luis, pero ahí no estaban sus restos. En 2018, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación confirmó la identificación de tres soldados argentinos caídos en Malvinas, entre los que se encontraba Luis Guillermo Sevilla quien según se informó custodiaba el aeropuerto de la Base Aérea Militar «Cóndor», en la isla Soledad, cuando cayeron durante un combate librado el 28 de mayo de 1982.
Hoy, una mezcla de emoción, ansiedad y mucha expectativa atraviesan a los familiares de caídos en la guerra de Malvinas que viajarán mañana a las islas por primera vez, para visitar el cementerio de Darwin y honrar a los soldados que fueron recientemente identificados. Esta tarde, el presidente Mauricio Macri los recibió en la Casa Rosada.
Gracias a un acuerdo humanitario entre la Argentina y el Reino Unido, y la participación del Comité Internacional de la Cruz Roja, hasta el momento, un total de 110 familias de caídos en la guerra recibió la confirmación positiva del examen de ADN que posibilitó la identificación de los restos de los caídos, enterrados durante casi 37 años en tumbas que llevaban la placa «Soldado argentino solo conocido por Dios».