Un changarín de Salvador Mazza murió aplastado por un colectivo. Empujaba el vehículo por un desperfecto mecánico. Ocurrió en un paso clandestino utilizado para pasar maíz de contrabando.
Es de las muertes que no importan porque a nadie conmueven. No habrá movilizaciones en su memoria, no se lo recordará en informes televisivos cargados de golpes bajos. Las páginas web que incluyan la noticia serán poco visitadas en el día y olvidadas para siempre en algún rincón de Google.
Pero los que hagan clic leerán que un changarín murió esta mañana, aplastado por el colectivo en el que viajaba. Intentaba atravesar la frontera por un paso clandestino para contrabandear maíz cuando el vehículo se detuvo por un desperfecto y los ocupantes debieron bajar a empujar.
FM Alba informó que el colectivo derrapó mientras era empujado, cayó de costado y aplastó al malogrado joven, que murió camino al hospital de Salvador Mazza.