Acompañado de medio gabinete, con una agenda apretada el presidente Mauricio Macri arrancó ayer con su operativo «conquista del Norte», un raid que incluirá la visita a Misiones y Chaco, y encuentros cara a cara con cinco gobernadores.

Minutos antes de las 10, Macri aterrizó en Puerto Iguazú, Misiones. De inmediato, junto al gobernador peronista Hugo Passalacqua, recorrió las obras en el aeropuerto local y se dirigió a un jardín de infantes.

Lo acompañaron los ministros Rogelio Frigerio (Interior), Guillermo Dietrich(Transporte), Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Miguel Etchevehere (Agro), Juan José Aranguren (Energía), Francisco Cabrera (Producción), Gustavo Santos (Turismo),Carolina Stanley (Desarrollo Social) y Sergio Bergman (Ambiente), además del secretario de Interior, Sebastián de Luca y el presidente de Pro, el también misionero Humberto Schiavoni

«Estamos demostrando en los hechos el federalismo que proponemos», afirmó a LA NACIÓN un integrante de la delegación. Macri, que se reunirá con la mesa deCambiemos del NEA después de hablar con la prensa, rompió otra rutina: la de dormir en su casa luego de cada gira por alguna provincia. Junto a Juliana y Antonia, hoy descansará en Iguazú, y mañana estará en Chaco para seguir con sus reuniones vinculadas al plan Belgrano de infraestructura, a las que se sumará también el gobernador peronista de Entre Ríos, Gustavo Bordet .
Leyes como la reforma política y laboral o la reforma del mercado de capitales no salen sin el apoyo de los gobernadores peronistas, repiten en Balcarce 50, al igual que el pliego de Inés Weinberg de Roca como nueva procuradora general de la Nación. Estos son otros objetivos del operativo «conquista», que Macri comenzó ayer y que terminará hacia el fin de semana.