El fiscal Ramiro Ramos Osorio consideró que Marianela Cansino no tuvo responsabilidad directa en la muerte de Thiago Quipildor ya que no ejerce control directo del desempeño de los psicólogos y asistentes sociales que trabajan en el Ministerio de Derechos Humanos.
Según el fiscal Ramiro Ramos Osorio, la ministra de Derechos Humanos, Marianela Cansino, no tuvo responsabilidad directa en la muerte de Thiago Quipildor, el niño de cuatro años que falleció el 8 de julio, estando bajo el cuidado de una familia cuidadora dependiente de esa cartera provincial.
“El titular de una cartera, como es en este caso la de Derechos Humanos, no puede tener control directo y monitorear la valoración que se hacen en los informes que haga un psicólogo o un asistente social, no es parte de su función”, manifestó el fiscal en La Gaceta.
Agregó que por la complejidad del caso, la Procuración General ordenó que todas las fiscalías trabajen mancomunadamente.
Por el caso hay doce personas imputadas, entre ellas un juez y funcionarios del Ministerio de Derechos Humanos, pero no la ministra, ni sus colaboradores directos.
