Sigue en la Cámara de Diputados el proyecto de ley que busca beneficiar con tierras fiscales valuadas en millones a uno de los colegios privados más caros de la provincia. (Juan Pablo Bento)
Una de las discusiones recientes del ámbito educativo argentino fue si la escuela debía ser vista sólo como un espacio de instrucción y preparación o también como un ámbito de contención para niños en situación de vulnerabilidad producto de la pobreza. El año pasado, la UNESCO enfatizó en un informe sobre la desigualdad existente entre las escuelas privadas y públicas. Sin embargo, los legisladores salteños estuvieron a punto de tratar una donación al Uzzi College de casi cuatro hectáreas valuadas en unos 20 millones de pesos.
Las reacciones adversas en la opinión pública motivaron que los diputados se abstuvieran de tratar el proyecto remitido por el Grand Bourg. Sin embargo, la iniciativa sigue en la Cámara. El fundamento para tamaña transferencia de recursos no es del todo convincente. Asegura que el Uzzi College “promueve la educación de niños y jóvenes, aportando conocimientos y herramientas que permiten a los egresados afrontar los cambios tecnológicos, informáticos, sociales y culturales propios de la sociedad actual, habiéndose posicionado, en el ámbito local, entre los establecimientos educativos más renombrados que imparten tal tipo de conocimientos”.
Según el Diputado del Partido Obrero, Arturo Borelli, el oficialismo postergó el tratamiento en la última sesión para no pagar el “costo social” que iba a tener la medida en caso de ser aprobada. “Van a venir toda una serie de maniobras para tratar de desviar la atención, y sacar el tema de la agenda”, advirtió, y agregó que “no se trata de una organización sin fines de lucro que no cuente con recursos para adquirir tierras”.
Llama la atención la liberalidad y el espíritu benéfico de este proyecto de ley que busca beneficiar al vanguardista y distinguido Uzzi College, cuando el propio Estado mostró su otra cara en el tratamiento de conflictos por tierras públicas, desplegando violentos desalojos comandados por las fuerzas de seguridad contra las familias sin techo.
Meritocracia
Mientras todo esto ocurre, las condiciones edilicias de muchos establecimientos públicos están a la vista y es fácil ver que no suelen ofrecer las mismas comodidades, recursos y nivel de instrucción que ciertas instituciones privadas. Corren con ventaja los hijos de las familias con mayor poder adquisitivo, que pueden pagar una cuota de 4 mil pesos como la del Uzzi College. El resto deberá doblegar sus esfuerzos si pretende llegar en condiciones de iniciar una carrera universitaria y finalizarla con éxito.
La semana pasada, el portal Salta Entre Líneas puso de manifiesto el trato desigual recibido por el Centro Polivalente de Arte, donde hace años se espera la concreción de las obras de reparación del edificio. La demora motivó una manifestación y un abrazo simbólico de los alumnos y docentes de esa institución pública.
El proyecto del Uzzi College será tratado nuevamente en la sesión del próximo martes. En el recinto de la Cámara baja ya tendrían las mayorías necesarias para aprobarlo.